Más de lo mismo

En la tarde del día de la fecha, Vélez perdió por 2-1, ante Gimnasia y Esgrima de la Plata, en un encuentro disputado en el Estadio Único de esa localidad. Los goles los marcaron Ponce para el Fortín, y Cuevas y Martinena para los triperos. Con la derrota, Vélez complica aún más su clasificación a la Copa Sudamericana, agregándole el pésimo nivel de juego demostrado.

Vélez ya no nos sorprende más. Si a mitad del campeonato decíamos que el conjunto de Hugo Tocalli era ciclotímico, hoy podemos convencernos sin demasiado esfuerzo, y decir que es siempre el mismo. La misma carencia de actitud. Las mismas faltas de ganas. La misma reticencia a atacar. La misma falta de amor propio. Y por sobre todas las cosas, la misma falta de un plan de juego. En el tiempo que lleva en el club, más allá de los jugadores que heredó, Hugo Tocalli no supo inculcarle a los mismos un patrón de juego, una forma de jugar al fútbol. Vélez no tiene identidad. Vélez es un rejunte de jugadores (algunos mediocres, otros decididamente malos, alguna estrellita también) que intenta entrar a la cancha y hacer el menor mamarracho posible. Sin embargo, a veces no lo logra, y por eso empata ante Racing y Gimnasia de Jujuy, pero no se conforma y pierde con Gimnasia de la Plata, Argentinos Juniors, River, San Lorenzo, Estudiantes, etc etc etc. Vélez es un equipo que no tiene la más pálida idea de que hacer con la pelota en los pies. Un equipo que juega sin laterales (sacar a Díaz para poner a Ugglesich es un atentado al buen gusto, y, para colmo, más si tenemos en cuenta que del otro lado está Lima, que ni juega de lateral ni juega de volante, hace sombra) y sin una idea de juego asociado. Ni siquiera, y esto es lo más grave, uno puede decir que Vélez juega al pelotazo. Ni eso puede! Qué nos queda si intentamos que entre Cristaldo y Guzmán ganen una pelota yendo arriba? Qué nos queda si esperamos que Zapata arme juego o siquiera ponga ganas? Qué nos queda si esperamos la vuelta de Balvorín como si fuera Van Basten, cuando lo único que hace es golpear a los rivales? El campeonato que disputó Vélez hasta ahora fue un campeonato decadente. Un campeonato en el cual se demostraron todas las falencias que tiene el equipo (desde la conformación del plantel, hasta las fallas individuales, la falta de inteligencia y de coraje en el técnico, y también la pasividad de la Comisión Directiva) y del cual es complicado extraer conclusiones positivas. Uno no dice todo esto porque Vélez haya perdido: eso es anecdótico. Así Vélez hubiese ganado ante el Boca "B", o hubiese empatado hoy, la mayoría del público velezano opinaría igual: este equipo no transmite nada. Porque vemos deambular a un Zapata, que en cada corrida nos cuesta dólares y dólares, cuando sabemos que le importa un pito jugar bien o mal, correr o no correr, total "él cobra"; vemos deambular a un Lima por el campo de juego, que no aprendió siquiera en todos estos años a bajar una pelota, a intentar jugar la pelota al piso o, aunque sea, poder correr y tener la pelota en los pies al mismo tiempo; vemos un Coronel que está verde, un Ugglesich tan burro como siempre, un Pellerano que de arriba da pena, un Ponce que arriesga innecesariamente, un Montoya que no sale de abajo de los 3 palos, y una dupla en ofensiva que, aún teniendo en cuenta que son pibes, ni pinchan ni cortan. Y hablamos de ellos porque los otros (Silva y Balvorín) ya demostraron que son capaces de cobrar hasta el último peso, y seguir siendo tan horribles como siempre (algunos, ni siquiera se dignan a jugar al menos).

Sinceramente, hoy, en mi interior, dije basta. Basta a toda la mierda que traen los dirigentes. Basta a todos los espejitos de colores que nos quieren vender desde el club. Basta de ser mediocres, de apostar a entrar a una Copa de mierda. No nos merecemos esto. No sigamos siendo pasivos cuando nos meten el dedo en el ojete una y otra vez, con ¿refuerzos? como Lima, Ríos, Silva, Balvorín, Zapata, y sigue la lista, interminable (recuerden: vuelve el querido Papa, el mismo que en Central pone huevos). Si hay que perder 2 años de campeonatos, sin pelearlos siquiera, pero se puede limpiar a toda la bosta que tenemos en el plantel, hagámoslo. Si vemos que los pibes adentro de la cancha se matan, los vamos a aplaudir, ganemos o perdamos. Si vemos que hay sangre, nos vamos a ir contentos de la cancha. ¿Cuanto hace que no nos vamos realmente felices del Amalfitani o de cualquier otra cancha? ¿Cuanto hace que no pasamos por arriba a un rival? ¿CUANTO HACE QUE NO SALIMOS A ATACAR? No quiero más Lavolpes, ni Tocallis, ni Zapatas, ni Núñez. No quiero más nada de eso. Quiero un Vélez grande, nada más...