miércoles, marzo 28, 2007

Puntazo en Brasil


Vélez empató sin goles, pero en un gran partido, ante Internacional de Porto Alegre. En un encuentro áspero, con un equipo que pegó mucho y que no fue sancionado correctamente para "equiparar" el mal arbitraje del uruguayo Larrionda, el Fortín logró un resultado que lo acerca casi a la puerta de la clasificación a la siguiente fase de la Copa Libertadores.

Vélez sorprendió desde el vamos con un planteo cuya última utilización (nefasta en esa ocasión, por cierto) fue ante Arsenal, en Sarandí, con el resultado de 1-3. En esa ocasión, el funcionamiento del equipo fue muy malo, y una de las razones fue la soledad y el mal desempeño de Mauro Zárate. Por suerte, la historia hoy fue diferente (por lo menos en cuanto a lo primero; lo segundo ya lo analizaremos más adelante). El partido estaba planteado básicamente para aguantar las embestidas de un rival que estaba obligado a ganar: por su gente, por ser local y porque su posición en la tabla no es de lo mejor. Vélez, en cambio, tenía la tranquilidad de ser puntero en el grupo. Con un Méndez notablemente adelantado (y atrasado a la vez (?)), y un Moreno movedizo, Lavolpe intentaba generar conexiones con los dos diferentes: Escudero y Mauro (los hinchas velezanos todavía soñamos con que se pasen la pelota entre sí). Esto finalmente no se dió, ya que Escudero jugó muy lejos de Zárate, y éste último nunca tuvo intenciones de jugar en equipo. Por su parte, la línea de fondo estaba estática, soltando a algún lateral de vez en cuando (se turnaban entre Ugglesich y Broggi, que entró en el primer tiempo). Bustos era el indicado para ser el termómetro del equipo, y Papa la salida por izquierda (ésto último tampoco sucedió).

Comienzo del partido, y se notaba que los brasileros iban a apretar con todo en este tramo del encuentro. Sin lograr ser profundos, mantenían el control de la pelota y complicaban con ciertas paredes que hacían por el medio entre Iarley y Fernandao (gran jugador). Vélez, por su parte, se limitaba a apretar con 2 hombres adelante, y luego replegarse con mucha gente atrás. Por una de esas cuestiones de la vida, el Barba le dió una manito a Vélez, ya que alrededor de los 27 minutos, Cristian, quien le había pegado una patada criminal a Bustamante y sólo fue amonestado (el Chelo no pudo continuar el partido, y fue reemplazado por Broggi) simuló una falta dentro del área velezana, y fue expulsado por Larrionda. Sin embargo, Vélez no se alteró por esta superioridad numérica de la que gozaba, e intentó mantener el dominio de la pelota fundamentalmente. No tuvo casi ninguna chance de gol, más que un intento de Méndez que, solo por derecha, no pudo bajar bien la pelota, pero pudo "tranquilizar" el partido. Mauro, por su parte, demostraba una y otra vez que aquello de la individualidad es un mal que nos persigue, y que los dólares que ya le van a venir lo están seduciendo inconscientemente . Escudero, la otra pieza en ataque, intentaba y probaba al arco, pero Kleber respondió bien en la otra oportunidad que tuvo Vélez. Se fue el primer tiempo, con un Inter nervioso, y un Vélez sereno.

En el segundo tiempo, la historia fue otra. El Fortín dominó de pe a pa, y tuvo varias chances para ponerse en ventaja pero, ya fuese por la fortuna o por la ineficacia de algunos de sus jugadores, no pudo hacerlo. Con un Broggi bastante activo por izquierda, y un Papa que comenzó a tomar más contacto con el balón, de a poco Vélez lo fue metiendo en un arco al Inter. Casi se pone en ventaja el equipo velezano con un gran cabezazo de Zárate (la única suya del partido) pero Kléber la sacó muy bien; en otra, Moreno la metió con la mano (según Larrionda) pero el juez de línea lo vió. Vélez estaba mejor. En cuanto a la defensa, raramente, y gracias al hombre de más, no se sufrían exabruptos, y todo marchaba con tranquilidad. Inter tenía alguna llegada aislada, pero no complicaba demasiado. Alrededor de los 25 minutos, Lavolpe realizó un cambio que en su momento fue discutido, pero hoy, a mi entender, fue totalmente correcto: Mauro afuera, entró Balvorín. Durante todo el partido, el purrete de 19 años demostró que no era su día, y con el paso del tiempo, y las individualidades que se mandaba (y que no prosperaban) perdió un poco de explosión debido al cansancio. En cambio, el jujeño entró con todo, y pudo aumentar en una jugada que increíblemente lo encontró solo, pero no pudo definir ya que se abrió demasiado. Así se fue el partido, sin demasiado problema para el Fortín.

Vélez hoy jugó mejor y probablemente haya merecido ganar. La realidad es que los jugadores demostraron estar convencidos de lo que estaban haciendo adentro del campo de juego. Punto importantísimo que se trae de Brasil, pensando en clasificar rápido, y pensando también en la confianza de los jugadores, que realizaron un gran partido, y no dudaron en ningún segmento del mismo.

Puntajes

Sessa (6): no tuvo demasiada incidencia en el resultado, pero decidió bien a la hora de elegir salir jugando o tirar el pelotazo.

Ugglesich (6): tranquilo, sereno, se mandó al ataque de vez en cuando, y cumplió su función.
Pellerano (6): se mostró firme, con algunas patriadas en ataque que no resultaron efectivas, pero con mucha sapiencia a la hora de defender.
Pellegrino (5): sigue mostrando las dudas que venía acarreando desde el partido con Colón (y un poco antes también). Duda mucho con la pelota en los pies.
Bustamante (-): no jugó demasiado debido a la terrible patada de Cristian.

Méndez (8): gran partido gran del mexicano que demostró tener criterio para jugar, pero también criterio para marcar, que es lo que más le cuesta. Hoy se paró casi como un 4 bis, pero a la vez como un wing derecho. Partido para que lo guarde en la vitrina.
Moreno (7): manejó los tiempos del partido, esta vez sin la necesidad de correr tanto como ante Colón. Cada día demuestra más que quiere ser caudillo; hoy lo demostró cagando literalmente a pedos a Mauro luego de una morfoneada del mismo.
Bustos (7): volvió a ser el relojito del equipo. Hacía los relevos y aguantaba solito en el medio cuando los brasileros tenían alguna contra.
Papa (5): no jugó mal, pero tampoco lo hizo demasiado bien. No desbordó por izquierda como Lavolpe quería, pero también es cierto que la marginación hacia el ex Central se sigue haciendo notar.
Escudero (7): intentó todo el partido, y se bancó las 1.000 y 1 patadas de los grandotes brasileros que pegaron sin que Larrionda diga nada. Le faltó un poquito más de profundidad.

Mauro (4): sí, ya sé que acá puede que me esté ganando varios lectores enojados (?). A mí, personalmente, me encanta Mauro como jugador. Me parece el diferente, el elegido para desequilibrar, el más talentoso. Recordemos que este puntaje se refiere básicamente a lo que hizo Mauro hoy, y no a lo que puede llegar a hacer. La realidad es que hoy aquellas individuales que suelen salirle bien, le salieron todas mal. Tuvo una sola buena (el cabezazo) y paremos de contar. Para colmo, el no jugar en equipo hoy le jugó doblemente en contra al encontrarse tan solo. Su salida estuvo bien porque le dió frescura al equipo.


Suplentes

Broggi (6): subió bien al ataque, pero volvió también a defender.
Balvorín (6): con los pocos minutos en cancha, complicó mucho a la defensa brasilera.


Cuestión aparte: alguien me puede explicar que problemas mentales puede tener una persona que trompea a un propio compañero en el medio de un partido que su equipo está dominando? Hay que estar totalmente desequilibrado en cuanto a la salud mental como para reaccionar de la manera que lo hizo Sessa (fuese la razón que fuese). Que está en un buen nivel, nadie lo duda, pero parece que las secuelas de la locura en la gente no se van de un día para el otro.

Por la clasificación


Estadio: José Pinheiro Borda
Árbitro: Jorge Larrionda (Uru)
Hora: 21.45
TV: Fox Sports

Vélez enfrenta esta noche, desde las 21.45, en Porto Alegre, al siempre peligroso y campeón del mundo Internacional. Partido clave para las aspiraciones del Fortín, que podría cerrar la clasificación a la próxima fase de la Copa Libertadores, y así apuntar con más fuerzas a lograr un colchón de puntos considerable en el torneo local, de cara a las Copas del año que viene (recordar que Lanús nos pasó el último fin de semana).
Luego de la decepción que significó el empate en el último minuto sufrido ante Colón, el sábado, por el torneo local, el Fortín quiere revertir esa imagen para lograr un buen resultado en suelo tan complicado como lo es el brasilero. Sin grandes cambios, más allá de las vueltas fundamentales de Mauro Zárate (el diferente del equipo) Hernán Pellerano (un bastión de la defensa) y Maxi Bustos (vuelve de la lesión), el Bigotón pararía un equipo similar al que viene utilizando, con el 4-4-2 al que nos venimos acostumbrando:

Sessa; Ugglesich (nuevamente como lateral derecho), Pellegrino, Pellerano, Bustamante (aparentemente recuperado del golpe sufrido el anterior sábado); Méndez, Moreno, Bustos, Escudero (o Papa); Mauro Zárate y Castromán (o Balvorín). Existen ciertas dudas en los puestos de volante por izquierda y en cuanto al acompañante de Mauro en el ataque debido a ciertas molestias que vienen sufriendo Escudero y Castromán. Lo más probable es que jueguen ambos.Es cierto que un triunfo sería espectacular allá en Brasil, pero no está mal mirar con buenos ojos la obtención de un empate como visitante en un lugar tan difícil, con canchas tan grandes (que los brasileros aprovechan tan bien con sus laterales) y jugadores de buen pie. La realidad es que Vélez tendrá que ser 100% en las chances de gol que tenga (que no serán muchas, según lo que uno puede imaginarse) y no deberá repetir (algo que parece muy difícil) los errores que venía repitiendo en defensa. Más que nunca, la locura de salir jugando siempre tiene que desaparecer hoy, de lo contrario es casi como suicidarse. Ellos tendrán buen juego con la bocha, pero nosotros debemos ser duros y compactos atrás para aprovechar la velocidad de Castromán (que probablemente dure un solo tiempo pero sirve) y el talento de Mauro (que ojalá se de cuenta que en una cancha como la del Internacional es muy jodido hacer la individual siempre porque tiene metros y metros por recorrer).

lunes, marzo 26, 2007

Tiempo de cambios?


Viendo y considerando las actuaciones, el nivel de juego desplegado y los resultados obtenidos en el certamen local, es inevitable que la cuestión florezca como por arte de magia: es la hora de inclinarse por la Copa? O vale la pena seguir intentando en el torneo local?
Desde mi opinión personal, podrá parecer un poco frívolo todo, pero considero que Vélez nunca tuvo el equipo ni el funcionamiento como para pelear el campeonato con equipos bien formados como Estudiantes, Boca o inclusive un rejuntado como San Lorenzo (que goza de mucha suerte gracias a Ramón). Sin embargo, una realidad inevitable es que el Fortín necesita muchísimo terminar en una buena posición en el campeonato ya que, de lo contrario, nos estaríamos quedando afuera de las Copas (algo que en Vélez no sucede hace mucho). Estimo que sería un golpe demasiado duro de asimilar para nosotros, los hinchas, por lo que existe siempre la posibilidad de alternar a algunos titulares con varios juveniles en el campeonato local.
El funcionamiento del equipo en la Copa Libertadores, exceptuando el partido con Nacional, ha sido bueno a veces, y muy bueno otras. Parecería ser que los jugadores fortineros se motivan "un poquito más" a la hora de jugar esta competencia internacional, y logran un volumen de juego considerable. No será la hora de probar a varias promesas que vienen asomando desde la cantera como Ereros (promesa que ya tuvo sus buenas actuaciones en la Copa pasada), Coria (con breves actuaciones), Razzotti (con pocos partidos en 1era), Torsiglieri, Coronel (una incógnita aún para los fortineros que no lo conocemos), etc? En estos casos, muchos consideran que ponerlos en 1era "de sopetón" puede significar quemarlos, pero esto no es así, siempre y cuando exista una contención psicológica del entrenador y de los compañeros con más experiencia dentro del plantel. Nunca se sabe como puede reaccionar un hincha ante resultados adversos, pero yo sinceramente no creo que la tribuna fortinera, que siempre se destacó por alentar, vaya a putear a estos pibes que recién empiezan por perder un par de partidos.
Puede ser un poco apresurado comenzar a pensar en tomar algún tipo de decisión sobre los objetivos de Vélez, pero la disminución y la merma en el estado físico de algunos jugadores ya es notable (ante Colón, la mitad del equipo sentía dolores o cansancio). Hace falta esperar hasta que estemos hundidos en ambos torneos para comenzar a decidir?

El marginado (?)

El hombre de la cabeza bamboleante (?)

Nunca me destaqué, no me destaco ni me destacaré por ser un acérrimo defensor del fútbol "papista", pero hay una constante en los últimos partidos del Fortín, y es que el ex lateral-volante de Rosario Central muchas veces aparece totalmente solo por la banda izquierda, y Escudero (o quien tenga la pelota en ese momento) opta por la más difícil, con tal de no darle el pase. Yo no se si existirá algún tipo de problema personal con el jugador, pero esto es algo que también advierte Lavolpe y que se cansa de repetirlo, ya que así se abre el juego como quiere el Bigotón, y se puede llegar al fondo para encarar hacia el arco contrario o meter el centro atrás.

La realidad es que al momento de atacar, Vélez siempre elige el camino más difícil que es por el centro, hasta que la jugada se embarulla y todo tiene que volver a empezar. Por qué no probar con nuevas variantes, como abrir bien hacia afuera con Papa o con Méndez, cuando se digna a llegar bien a posición de ataque y Lavolpe no lo para como un 4 "bis"? Los jugadores no entienden o no quieren entender?

domingo, marzo 25, 2007

Así no

La foto no responde al partido, pero sí a lo mejor que tiene Vélez
Vélez 1 - Colón 1

Los hinchas de Vélez nos hemos cansado de advertir: nos gustan las cosas audaces, pero no las necedades. Lo de ayer fue un papelón en cuanto a saber o no entender a un plantel. Por cuanto tiempo más se puede seguir intentando una línea de 5 que los jugadores no sienten? Por cuanto tiempo más se va a seguir intentando inventarle cualidades técnicas a jugadores limitados como Pellegrino, Ugglesich, etc? Por cuánto tiempo más se va a seguir intentando salir por abajo SIEMPRE cuando los jugadores NO SABEN?

No es el fin del mundo, fue un solo partido y por suerte ante Colón. Si Vélez ayer hubiese tenido el rendimiento que tuvo ante un equipo medianamente ordenado, podría haber sufrido una goleada. Hacía mucho tiempo que no se observaba a un equipo del Fortín deambulando en la cancha como lo hizo el de ayer, y para colmo en cosas obvias! Un defensor debe saber que, si tiene que salir jugando, lo hace para afuera, NUNCA para adentro! Y ahí lo veíamos a Pellegrino gambeteando jugadores hacia el lado interior del campo al lado del área de Sessa. Tal es el disconformismo con salir jugando por abajo de los jugadores y del arquero sobre todo, que basta con verle la expresión en el rostro al jugador que ayer cumplió 300 partidos en Primera para saber que no está convencido de lo que está haciendo. Los jugadores no son estúpidos: conocen sus limitaciones técnicas. Al parecer, Lavolpe no. O no los conoce, o prefiere seguir sacando datos de su librito de fútbol mexicano (el que tan poco le sirvió en su paso por Boca). Seamos lógicos, seamos pensantes, seamos cerebrales: cuando hay que salir jugando, se sale jugando, pero cuando no, se la revienta! No es tan difícil, el equipo tiene variantes arriba como para poder hilvanar situaciones de gol sin tener que arriesgar tanto en el fondo.

Del resumen del partido, y del partido en sí, no tiene mucho sentido hablar. Vélez empató y si se lo mira con tranquilidad, podemos decir que es un empate milagroso. Yo no soy hombre de las estadísticas, pero el equipo de Santa Fe ayer debe haber tenido varias situaciones claras de gol.

En el primer tiempo, Vélez tuvo un buen manejo ofensivo. Tuvo ese "punch" arriba que necesita, esa marca diferente, de la mano de grandes jugadas de Castromán (con toques sutiles, se deshacía de rivales cual clase de ballet) de un gran primer tiempo de Escudero, y de un Moreno y Fabianesi que estuvo en toda la cancha (y también en ataque). Pero atrás ya, desde los 2 minutos del primer tiempo, había dejado claro que iba a ser un partido para sufrir. Una a otra se repitieron las situaciones de gol para el conjunto visitante. Nosotros tuvimos un par, es cierto, pero no pudimos concretar. Que el partido haya terminado 1-0 en el entretiempo, ya era un milagro.

En el entretiempo, la gran aparición de uno de los ídolos (sino el MÁS) grande de toda la historia velezana: José Luis Félix Chilavert Gonzalez. El arquero más grande de todos los tiempos dió unas breves palabras para acompañar al equipo, y recordar al conjunto multicampeón de la década del 90´. "Al paraguayo nunca lo voy a olvidar".

Segundo tiempo, y desde la cabeza de Lavolpe la idea de replegarse en el fondo pareció totalmente nítida. Vélez salió llamativamente de contra, pero ni siquiera era un equipo sólido: el Fortín era un Tembleke. Intentó armar una línea de 5 con Razzotti de central (DE CENTRAL! a mirar videos, Lavolpe) que no funcionó. A varios jugadores les quemaba la pelota (Robles, Papa, Pellegrino) y se desentendían de las jugadas rápidamente. Colón, por su parte, siguió manteniendo el dominio de la pelota y en los primeros 20 minutos metió a Vélez en su propio arco. Desde el banco, luego de este aluvión, se escuchó uno de los primeros gritos coherentes: "jugala larga" hacia al Gato Sessa. El Bigotón no quería saber más nada con regalarle posibilidades de gol a Colón por desaciertos defensivos propios (esto sucedió durante todo el primer tiempo). Sin embargo, ni esto ayudó para que Vélez levantara su nivel, y sólo se conformó con evitar llegadas del rival. Llegadas que se detuvieron un poco, pero, a 1 minuto del final, y luego de la jugada menos pensada, se convirtió en el empate. Un empate inmerecido: Vélez debió perder (y no es de poco hincha decir esto, valga la aclaración, sino de realista).

Yo creo, sinceramente, que lo mal que jugó Vélez ayer, con errores de primer grado, no puede volver a repetirse. Quiero creer que es un partido en miles; que es una conjunción de malos días; pero algo me dice que si no se cambian varias cosas en este equipo que quiere Lavolpe, a Vélez se le va a complicar mucho. Ojalá que le encuentre la vuelta el ex arquero de la Selección, y que veamos al Vélez sólido del partido ante el Inter. Ojalá...

Puntajes

Sessa (8): de lo mejorcito del Fortín. Sigue demostrando su gran momento con un par de tapadas mano a mano, y una espectacular ante Enría. Nivel de Selección, sin dudas.

Méndez (4): jugó? No me equivoco si pienso que muchos nos sorprendimos al ver las pocas ganas que demostró el oriundo de México. Nadie duda de sus condiciones, pero a veces hay que meter un poquito más en este tipo de partidos.
Pellegrino (5): alternó buenas y malas. Sacó mucho de arriba, pero por abajo, junto a Ugglesich, nunca encontraron la vuelta a las jugadas que producía Colón.
Ugglesich (6): el único que intentó mostrar seguridad en la línea de fondo. Con muchas falencias, es cierto, pero con más tranquiliadd que los demás.
Bustamante (-): casi no jugó por la lesión que sufrió en la cabeza.

Robles (4): lo único bueno que realizó en todo el partido fue el pase a Balvorín, luego de una GRAN jugada de Castromán. Esto no es pegar gratuitamente, eh, en el video del partido debe estar la cantidad de pelotas que perdió en nuestro propio sector de la cancha, y que generaron contragolpes peligrosísimos para Colón. El pibe estuvo muy verde.
Moreno y Fabianesi (9): por el despliegue que demostró; por las ganas que intentó contagiar; por el ímpetu para pelear cada pelota al final; porque nos cerró la boca a varios que hablábamos de poco sacrificio. Por todo eso, ayer, aunque no haya sido demasiado notorio en el resumen del partido, fue la figura. Ojalá se repitan varias de estas buenas actuaciones del español.
Papa (4): perdido totalmente en la cancha. No sabía si enganchar para afuera, si salir a marcar, si esperar, si dar el pase, si tenerla. Se lo vió muy dubitativo, y para colmo, cada vez que pasó por detrás de Escudero, el Pichi elegía cualquier otra opción. Vuelvo a afirmar que esa no es posición para Papa.
Escudero (5): el partido del Pichi fue raro. Intentó siempre, en el primer tiempo sobre todo, pero en el segundo desapareció completamente (más que en alguna corrida aislada).

Balvorín (6): hizo el gol, y tuvo un par más que se auto-fabricó, pero estuvo demasiado morfón, cuando muchas veces lo tuvo a Lucas picando por derecha.
Castromán (7): si bien este puntaje sería más acorde a su primer tiempo, es un puntaje global porque fue de lo más peligroso de Vélez en ataque. Demostró que está con ganas, y que quiere volver a ser el que fue.

Suplentes

Broggi (5): no mostró seguridad ni proyección.
Razzotti (4): el Bigotón lo mandó al muere, y lo puso en una posición insólita para el volante central.
Ocampo (5): no tuvo mucho tiempo, pero en el que tuvo, intentó.

sábado, marzo 24, 2007

Ante el Sabalero


Estadio: José Amalfitani.
Inicio: 21.10 horas.
TV: TyC Sports.
El árbitro: Carlos MAGLIO

Desde las 21.10 hs, arbitrado por Carlos Maglio, Vélez se enfrenta hoy, en el José Amalfitani, ante Colón de Santa Fe, en un partido que es vital para confirmar la remontada que viene teniendo el equipo del escandaloso Ricardo Lavolpe. Si bien el conjunto de Julio Falcioni no está pasando por uno de sus mejores momentos futbolísticos, no hace falta aclarar que cualquier equipo en el que esté el mencionado va a complicar al Fortín. "Karma" le llaman alguna gente, otros solo mala suerte; la realidad es que no va a ser un partido fácil, y menos aún para los jugadores, teniendo en cuenta que deberán enfrentarse a dos viejos conocidos del Club: Emanuel Centurión (hasta hace muy poquito formó parte del plantel) y Juan Falcón (de estupendas actuaciones con la casaca fortinera).

En cuanto a las posibles formaciones, Vélez (o debería decir el "Bigotón"?) apostaría nuevamente por esta línea de 4 que tan buen provecho ha sacado, y realizaría 3 variantes con respecto al último partido.

Vélez formaría con: Sessa; Méndez, Ugglesich, Pellegrino, Bustamante; Robles, Moreno, Papa, Escudero; Balvorín y Castromán. Como habrán apreciado, se destacan las vueltas de Papa y Balvorín al primer equipo, y la aparición en el mismo de Javier Robles (con buenas actuaciones en los partidos que le tocó entrar) debido a las ausencias de Hernán Pellerano y Mauro Zárate (acumulación de amarillas). Con respecto a esto, lo que gana Vélez hoy con los cambios es un poco más de audacia ofensiva (sí, todavía se puede ganar más) de la mano del pibe Robles que, fiel a su naturaleza de 10, tiene la pelota y sabe moverla. Por otro lado, probablemente con la incursión de Balvorín en el equipo, no se vea tanta gambeta y tanto desparramo de rivales como si estuviera Mauro, pero sí mucho sacrificio y un delantero potente de área. Con el retorno de Papa, por otro lado, Vélez tendrá un poco más de claridad en el medio para tocar la pelota.

Colón, de la mano del ex Vélez Julio Falcioni, formaría con: Tombolini; Juan Fernández, Píccoli (mala leche), Reynoso, Rivarola; Falcón, González, Esmerado, Grisales; Centurión; Sand.

A simple vista, un claro 4-4-1, combativo, con 3 volantes centrales de marca pura (Falcón, González, Esmerado) y 2 para la creación (Grisales sin tanta claridad, y el ex Vélez Emanuel Centurión, del cual todos conocemos sus capacidades técnicas para manejar la pelota).

Habrá que tomar los siempre necesarios recaudos ante el complicado Falcioni, ya que seguramente plantee un partido de contragolpe, y Vélez varias veces quede mal parado en defensa (algo que ya es costumbre, y con lo cual se está empezando a vivir). La clave en el partido de hoy estará por ser un equipo corto: todos atacan, pero también todos defienden.

jueves, marzo 22, 2007

La falta de desborde


Si bien el equipo está en plena remontada, y podré ser tildado desde "pájaro de mal aguero", hasta "gata flora", pasando por acusarme de "buscarle la quinta pata al gato", no puedo evitar cuanto menos que mencionar uno de los déficits más notables que tiene el equipo: la falta del típico desborde y centro atrás.

Todos estamos de acuerdo con la idea que pregona que los wines tan famosos allá por los años 30´ y 40´dejaron de existir hace mucho (de eso no cabe dudas) pero no por eso debe eliminarse un recurso tan válido como lo es el ir por la raya y tirar el centro atrás, que deja muy incómodos a los defensores contrarios. En el fútbol argentino en general, pero más particularmente en el club que nos incumbe, que es Vélez, la carencia de este recurso es notable. Cuánto hace que no vemos ir hasta el fondo (cuando digo "fondo" es la raya del fondo, no 3/4 de cancha) a un jugador del Fortín y enviar un centro hacia atrás para algún jugador que entre de frente al área? O ni siquiera! Con tal de que mande un centro desde el final de la cancha estaríamos felices! Masomenos desde el equipo campeón, con el Galgo y Bravito por los costados. Se sabe que el Bigotón siempre fue defensor a ultranza de jugar por afuera (tal cual lo hacía el gran Marcelo Bielsa, el cual rezemos que alguna vez vuelva) y que le gustan jugadores audaces, que lleguen al fondo, pero en Vélez, "Por H o por B" nunca lo pudo lograr. Ya sea por las características de los jugadores (exceptuando a Papa, en Vélez no existen muchos jugadores con este tipo de cualidades, como Sena, Méndez, Bustamante, Broggi; Robles es un caso particular, ya que tiene la capacidad pero decide siempre enganchar por adentro) o por ineptitud para transmitir el mensaje del propio DT, a Vélez le está faltando esto. Otra gran verdad en el fútbol es que siempre la efectividad del ataque va a ser mayor si es por afuera y menor si es por adentro, ya que el jugador hace la diferencia cuando encara y saca del molde al defensor rival.

En fin, desde mi humilde opinión, creo que una de las fallas en cuanto a creación de oportunidades de gol y en la ofensiva en general que puedan surgir viene por este lado, y no estaría de más que el actual entrenador del Fortín concentrara un poco más los entrenamientos en lograr "patear el tablero" en los últimos metros y sorprender.
PD: Perdón por lo precario de la imagen pero fue más conceptual que artística (?).

miércoles, marzo 21, 2007

El pibe que se hizo hombre


Cuánto cambió desde aquel Hernán Pellerano que asomaba en la Primera, luego de la segunda partida de un ídolo fortinero como lo fue Fabrizio Fuentes. Lugar difícil de ocupar el de un jugador que le dió tanto a Vélez, y cubrió con tanta sapiencia el lugar en la defensa campeona de Vélez Sarsfield. Pensar que cuando dió sus primeros pasos, allá por la primera fase de esa Copa Sudamericana desastrosa del Fortín (sendas caídas, goleadas, ante Colón de Santa Fe) no muchos creían en sus capacidades, pero a fuerza de buenas actuaciones, y con muy poca edad, se fue convirtiendo, de a poco, en un referente más del plantel.

Sin dudarlo, el "Pelle" encontró su lugar de a poco, ya que fue rotando por varios puestos de la defensa: si mal no recuerdo, comenzó de central por la izquierda, luego hasta llegó a jugar un par de partidos (fugaces) como lateral izquierdo, y finalmente llegó al lugar de donde nunca habría tenido que salir, el puesto de central por la derecha (es cierto que en los últimos partidos del mercenario jugó como lateral derecho, pero fue por necesidad más que por ota cosa). El buen juego aéreo, el excelente trato de balón (manteniendo la cabeza fría cuando muchos eligen revolearla bien lejos) y la elegancia para salir jugando lo convirtieron en un eje fundamental de un plantel que, pese a tener muchos partidos en Primera, nunca se destacó por tener demasiada experiencia. De a poco fue formando una pareja de centrales durísima junto a Maxi Pellegrino, y se fueron entendiendo de la mejor manera. Y llegó Lavolpe, y llegó el cambio de lugar nuevamente. Pasó de ser netamente central a compartir esta función con la de lateral también (obviamente por derecha) teniendo la obligación ahora de crear y salir jugando. Le costó y mucho al hermano del volante de Racing, ya que nunca se pudo amoldar totalmente a este puesto. Para su beneficio, el del equipo, y el de todos los fortineros, el Bigotón recapacitó y vió en la línea de 4 la solución a los problemas defensivos, ubicando a Hernán Pellerano en el lugar adecuado (vale aclarar que, gracias a la intervención de Mariano Ugglesich, y la de él mismo, no jugó de lateral como quería Lavolpe, sino como central).

Hoy Hernán cambió mucho desde aquel pibe que había quedado libre de River, jugó en All Boys, llegó a Vélez, y tuvo partidos complicados en sus comienzos. Hoy uno tiene la seguridad de que, si debe pelear en el mano a mano, va a ganar. Si debe bajar una pelota, lo va a hacer con categoría. Si debe pelearse con el rival de turno, y debe pegar alguna que otra murra, no va a dudar (como no dudó con su hermano ante Chicago). Y gracias a todo esto, Hernán tuvo su recompensa, que fue la Selección Argentina. Finalmente, el espíritu Grondona no se pudo oponer, y llegó un jugador de Vélez a la Selección (que estuviese jugando en Vélez, claro está). Él, junto a Maurito, son los dos representantes fortineros en Ezeiza, con la ilusión de llegar a la Copa América.

Desde acá, te mandamos toda la suerte del mundo, y ojalá nos hagas sentir orgullosos como lo hacés en el Fortín.

domingo, marzo 18, 2007

Otro pasito más


No iba a ser fácil el partido en la "Tacita de Plata"...y de ninguna manera lo fue. Vélez derrotó hoy por 1-0 a Gimnasia de Jujuy, como visitante. Ricardo Lavolpe finalmente, luego de muchas idas, vueltas, especulaciones y misterios, volvió a repetir el esquema táctico del miércoles pasado, ante Internacional de Porto Alegre (que tanto resultado había dado) y paró las famosas "2 líneas de 4 mentirosas", formando con: Sessa; Ugglesich, Pellerano, Pellegrino, Bustamante; Méndez, Moreno, Broggi (reemplazó a Papa, lesionado) Escudero; Castromán y Mauro. Formación bastante lógica, teniendo en cuenta los últimos partidos disputados, pero aquí es donde yo me hago una pregunta: de qué quiere hacerlo jugar el "Bigotón" a Ariel Broggi? Sabido es que el joven jugador es un lateral izquierdo "y nada más". Siempre se destacó por ocupar esa posición con un gran despliegue y un gran sacrificio, pero no suena demasiado sensato ponerlo de "doble 5" cuando no es un jugador que se destaque ni por recuperar ni por armar juego. Muchas veces hasta se lo llegó a tildar de "atolondrado" al nacido de las inferiores de Vélez, por ese ímpetu con el que disputa todas las pelotas. Mucho no se entiende el puesto que Lavolpe quiere inventarle, pero bueno, será cuestión de ver como evoluciona. Gimnasia de Jujuy, por su parte, intentaba rescatar algún punto para seguir adelante en su objetivo de salvarse del descenso.

No fue un partido demasiado emotivo ni con muchas llegadas de gol. En el primer tiempo, apenas algún intento tibio de Castromán y Maurito Zárate para Vélez, y algunos pelotazos a las espaldas de los centrales velezanos para los locales. Escudero tuvo un gran primer tiempo, pero nunca llegó a dar la puntada final con criterio, por eso es que el primer tiempo se fue sin pena ni gloria. Vélez iba e iba, pero sin claridad, y Gimnasia esperaba agazapado y sin desesperarse.

En el segundo tiempo, al Fortín se le aclaró un poco el panorama con la expulsión del mala leche de Gabriel "Roña" Ramón (?) quién le aplicó un golpe de puño en el rostro al "Ruso" Ugglesich. Con el hombre menos, los jujeños se arrinconaron totalmente en su área y dejaron venir a un Vélez que tenía hambre de victoria, por eso no extrañó que llegara al gol, y, cuando no, de una pelota parada. Mauro tiró un centro magistral al corazón del área que el Ruso, apareciendo por sorpresa, peinó para ubicarla abajo, a la izquierda del arquero, imposible para Valdiviezo. Vélez se ponía 1-0 y quería más, pero no quedaba mucho tiempo. Sólo quedó tiempo para la expulsión de Silva por simular, y para alguna llegada más de Balvorín, que no supo resolver de la mejor forma.

Vélez volvió a ganar, al igual que el sábado y el miércoles pasado, y dejó una buena imagen, superando a un rival muy duro allá en Jujuy, que se plantó con un esquema extremadamente defensivo, que el Fortín supo vulnerar. El karma de los equipos chicos con necesidades grandes que atormentaba a Vélez parecería ser que de a poco se va esfumando, y que el equipo va encontrandole la vuelta para resolverlo. Por otro lado, buena actitud la de Ricardo Lavolpe quién volvió a parar las 2 líneas de 4 que tan bien habían funcionado, y no quiso experimentar ni realizar cosas alocadas (por más que tiene predilección por la línea de 3). Otro buen partido de Castromán, y otra asistencia de Maurito. Vélez está remontando.

miércoles, marzo 14, 2007

Y se hizo la luz!


Por fin, señores, por fin este equipo de Vélez me da la satisfacción de decir: jugamos bien. Porque de eso no hay dudas. Porque tuvimos a un Lucas enchufadísimo en los primeros minutos (luego se desdibujó un poco), porque tuvimos a un Moreno y Fabianesi movedizo, dinámico, y sobre todo, porque tuvimos a un Escudero explosivo. Esas fueron algunas de las razones por las cuales el conjunto de Liniers logró hoy una victoria categórica ante un equipo brasilero que mucho distó de ser, en cuanto a nivel futbolístico, el campeón mundial del año pasado. Pero sin dudas, a mi entender (mi humilde entender, bah) la razón fundamental por la cual hoy Vélez logró sostener un nivel de juego a lo largo de todo el partido fue una sola: Ricardo Lavolpe no come vidrio.


Desde el vamos, al ver el planteo del Fortín, uno supuso que el entrenador reflexionó seriamente y supo entender que aquel esquema tan discutido (con los 3 o 5 defensores, como más le guste al lector) no estaba funcionando últimamente, y probó utilizar dos líneas de 4 "mentirosas", totalmente activas. Por los laterales, puso a Ugglesich y a Bustamante, bastante limitados en ataque, con la intención de dejar de sufrir los sofocones en defensa a los que nos tenía acostumbrados este equipo. En cuanto a la zaga central, por suerte el Bigotón se concientizó de que Pellerano sirve como central, y lo puso en dupla junto a Maxi Pellegrino. En la línea del medio, por un costado puso a un Méndez sin profundidad en ataque pero con funciones defensivas claras, y a un Escudero que se debatía entre ser media punta o volante por izquierda. En el medio, Moreno y Papa formaron un dúo extraño, ya que ambos se caracterizan por tener un gran manejo de pelota, y no tanto en la marca. Y en ataque, la vuelta tan esperada: Lucas Martín Castromán retornó al equipo, después de una prolongada inactividad (a las que nos tiene acostumbrados) y se ubicó adelante junto a un Mauro Zárate que, parecería, comienza a ser cuestionado por la gente.

Comienzo del partido, y Vélez se hizo con la pelota. De la mano de un Castromán con todas las ganas, y un Escudero que iba e iba por la izquierda, se formaron un par de jugadas interesantes que no pudieron culminar con el grito de gol tan deseado. Ni qué hablar de la patada criminal de Ceará a los 8 segundos de partido...si no fue roja, fue sólo por el tiempo que había transcurrido desde el inicio del partido. Mauro, en una de las que tuvo, empezó una jugada bárbara, toqueteando y triangulando en la mitad de la cancha con Papa, que le devolvió un pase en cortada. El menor de los Zárate enganchó, quiso patear al arco, pero fue tapado por el defensor, y ese rechazo fue a parar a los pies de Lucas Castromán, que no perdonó. Bombazo al medio del arco, y el 1-0 para el Fortín. Vélez demostraba que no pensaba esperar al rival pese a su jerarquía, y buscaba el segundo. Segundo que llegó de una jugada preparada (aplauso, medalla y beso para el Bigotón, que sigue acertando en este rubro). Tiro libre en la puerta del área, Mauro que toca al medio con Escudero, que aparece de la nada, gambetea a uno de los morenos defensores del Inter, y casi cayéndose remata al palo izquierdo de un arquero brasileño que pareció un poco distraído, ya que casi ni amagó a tapar la bocha. 2-0 para Vélez, y fiesta en Liniers. En estos primeros 20 minutos, Vélez pareció liquidar el pleito, y comenzó a regular un poco de cara al duro segundo tiempo que se avecinaba. Los brasileños intentaban pero en la única que tuvieron, Sessa se lució, tirandola al córner. No mucho más.

En el segundo tiempo no se vió el mismo Vélez aceitado y ofensivo que en el primer tiempo, pero sí se vió otra característica también fundamental: saber aguantar el partido. El Fortín no sufrió en este rubro, esperando agazapado (es cierto y vale decirlo) pero teniendo en cuenta que esperar retrasado no quiere decir mandar la pelota a cualquier parte. Tuvo varias contras apetecibles, pero no podía concretar, hasta que el Pichi, en uno de sus mejores partidos en lo que va de su corta carrera en Vélez, encaró por izquierda, se abrió y metió un zurdazo al primer palo del arquero. 3-0 y partido recontra cerrado.

Buen triunfo velezano el de esta noche, que disipó un poco las dudas en cuanto a la continuidad de Lavolpe al frente del plantel, y su mala relación con el mismo. Al parecer, la reunión que tuvieron los jugadores la semana pasada sirvió para limpiar ciertos rencores entre algunos jugadores del equipo y el Bigotón. Se vió a un Vélez más compacto con la línea de 4 en el fondo (por más que ganaron la mayoría de las veces los visitantes en las pelotas áreas) y mas agresivo sin Bustos en cancha. Sera cuestión de seguir por la misma senda y esperar por un triunfo en un escenario difícil como lo será Brasil.

Para afianzar la remontada


Hoy Vélez se enfrenta, desde las 19.30, ante el Internacional de Porto Alegre (último campeón del Mundial de Clubes, derrotando nada más y nada menos que al Barcelona de España) en el José Amalfitani, con la esperanza de lograr un triunfo que lo posicione en posición más alta del grupo (esperando así que juegue su otro competidor actual, Nacional de Montevideo). En cuanto a los formalismos: Vélez jugaría con el esquema y los nombres de siempre, exceptuando el hecho tal vez de que Bustos, con una molestia, no llegue para integrar el plantel profesional de esta noche (lo esperarían hasta último momento) y Pellegrino no se recupere del todo de una lesión sufrida ante Quilmes. A priori, el equipo sería ese que ya todos sabemos de memoria: Sessa; Pellerano, Pellegrino (en duda, sino lo reemplazaría Ugglesich), Bustamante; Méndez, Moreno y Fabianesi, Bustos (en duda, sino probablemente el técnico adelante al "Fofi" unos metros adelante, y ubique a Ugglesich en la posición de stopper) Papa; Escudero; Balvorín y Mauro. Recordemos que el Fortín viene de ganar en su debut, en tierras ecuatorianas, ante el Emelec de ese país, y de empatar de local, ante Nacional de Montevideo (uno de los punteros del grupo, junto a Vélez). Inter, por su parte, viene de perder ante Nacional de visitante, 3-1, y de ganarle de local al Emelec (la murga del grupo) por 3-0.

Habrá que tomar todos los recaudos que sean necesarios ante un equipo con tanto potencial, como lo son todos los conjuntos brasileros, e intentar aceitar al máximo, más que nada, los movimientos defensivos. Si los equipos nacionales aprovechan alguno de todos los errores que brindamos en defensa, hoy este fenómeno va a estar potenciado al doble. Moreno y Fabianesi, como eje y creador de fútbol, deberá tener una buena noche si los fortineros esperamos sacar un buen resultado, acompañado por un Mauro Zárate (si Dios quiere renovado) y un Papa que desborde por izquierda.

A alentar, Fortín, que la Copa no está lejos!

lunes, marzo 12, 2007

Cambio de esquema o cambio de nombres?


Se ha hablado, se ha discutido y se ha criticado el sistema táctico que eligió Lavolpe desde que asumió en la dirección técnica del "Fortín". Un sistema que, desde que desembarcó en la Argentina (en su momento, de la mano de Bosta Juniors) prometió ser "novedoso" y "ultra-ofensivo", pero que, aplicado a la realidad, nunca tuvo toda la efectividad que prometía, y no cumplió con las expectativas que generó. El ya famoso 3-5-2, 3-4-3, 5-2-3 o 5-3-2 (según la persona que lo analice y/o el momento del partido) en la teoría promete movilidad extrema en sus jugadores, apariciones sorpresivas por los costados y un espíritu ofensivo al 100%. En la realidad, lo que garantiza (todo esto es HASTA AHORA) es una lateralización del juego exasperante, una lentitud inusual en un equipo de Primera (asemejándose a la nefasta Selección de Pekerman, comandada por el Capitán Frío) y oportunidades claras de gol para los rivales, ante la mínima equivocación (sea de los defensores como de los volantes).

Cuando un esquema táctico se implementa, lo primero que se tiene que tener en cuenta es, obviamente (y acá no estamos descubriendo América señores) el tipo de jugadores con los que uno cuenta. Hemos visto que en la teoría varios planteos tácticos suelen ser casi perfectos pero, a la hora de la verdad, los jugadores no pueden cumplir con él (sea por incapacidad o por tener otras características diferentes, como en Corea-Japón 2002). Esto es lo que pasa hoy en día con el Vélez del "Bigotón": se intenta jugar por abajo y no rifar nunca la pelota con varios jugadores que no se destacan por ser dotados técnicamente. Por nombrar algunos: Pellerano, Pellegrino, Bustamante, Bustos, Balvorín, Broggi, Sena, etc. Si vamos a la lógica pura, uno piensa que, de querer jugar al ras del piso y a pura pincelada de talento (como quien dice) estos no son los jugadores indicados. Por nombrar algunos jugadores que se destacan por su buen pie: Robles, Ocampo, Ereros, etc. Que no se malentienda: uno no dice que deberían jugar estos últimos, y que Vélez debería ser Holanda del 74´. Uno no es necio ni estúpido, y sabe que en el fútbol argentino que tenemos hoy en día ser "suicidamente ofensivo" trae consecuencias lapidarias. A lo que voy con esto que intento explicar es a tener en cuenta, lisa y llanamente, las capacidades de los jugadores que integran el plantel profesional de Vélez Sarsfield a la hora de pararlos en cancha. Es la clásica discusión: el DT debe adaptarse a los jugadores, o viceversa? Obviamente que estoy más cerca de la segunda opinión, pero creo que todo debe ser un conjunto. No sirve absolutamente de nada tener jugadores de 10 si no se los sabe ubicar en el campo de juego (no es nuestro caso, pocos cracks tenemos hoy en día dando vuelta por el plantel).

A los ejemplos:

1) Si Lavolpe quiere que las bandas sean salidas constantes a la hora de atacar, es insensato ubicar a Sergio Sena (como ya lo ha hecho varias veces) en la posición de "carrilero", cuando todo aquel que vió al Fortín y lo siguió en el último tiempo (masomenos 2 o 3 años) sabe que el oriundo de Villa Fiorito llega a 3/4 de cancha y da el pase atrás. Eso es así, y resiste cualquier refutación, porque se repite partido a partido desde hace varios campeonatos atrás. Preferible poner desde el arranque a un pibe como Robles, que tiene más gambeta, más técnica y más profunidad.

2) Si la dupla Balvorín - Zárate está fundamentada en el hecho de lograr que Zárate desborde para tirar el centro y que cabecee el jujeño, hay un error de concepto grave nuevamente: todo aquel que haya visto a Vélez en los últimos 2 o 3 años (o ni siquiera, en los últimos 2 campeonatos) sabe que Mauro no es del tipo de jugador que se pega a la raya y manda el centro, sino que engancha e intenta patear al arco. En el último partido, ante Quilmes, fue peor: Balvorín le mandaba los centros al chiquitín Zárate.

3) Si se intenta que los defensores salgan SIEMPRE jugando (no me vengan con que tienen permitido el pelotazo porque es mentira) habría que pensar en buscar jugadores que, además de la marca, sepan jugar al fútbol. Pellerano, Pellegrino y Bustamante (el trío defensivo actualmente) poseen dotes técnicos mínimos. Es cuestión de lógica! Si se intenta que salgan jugando o gambeteando (como lo he visto hacer al suicida de Pellegrino en nuestro propio campo) hay que poner o comprar a alguien en ese puesto que tenga la capacidad de hacerlo. Pero nuevamente encontramos otro error de concepto: los defensores (más en una línea de 3) tienen que saber marcar, nada más y nada menos. No se puede sobreexigir al jugador o agregarle más responsabilidades de las que ya tiene. A los delanteros se les pide que metan goles; a los volantes, según su función, que recuperen o que jueguen; a los defensores...qué se les va a pedir? Que marquen, muchachos, que marquen! En todo caso el juego debería pasar directamente por Moreno y Fabianesi, que tiene la capacidad de hilvanar jugadas en ataque, y así evitar contragolpes mortíferos.

Para no ser tediosos con la táctica y la estrategia, preferible no seguir (al fin y al cabo, todos somos técnicos parece) pero no me parece alocado que el entrenador revea este tipo de falencias (por lo menos a mi entender) y trate de encontrarle el puesto a cada jugador dentro del campo de juego.

sábado, marzo 10, 2007

Ha nacido un héroe?


Por fin. Vélez consiguió esta tarde-noche, en el José Amalfitani, una victoria que le da aire al conjunto del "Bigotón" Ricardo Lavolpe, muy cuestionado en las últimas presentaciones del "Fortín". El equipo de la figura del partido, Moreno y Fabianesi, no jugó nada bien pese al resultado. Lo cierto es que el plantel velezano no encuentra ese volumen de juego que supo tener en los amistosos de la pretemporada, y esto es algo que preocupa. El partido de hoy se ganó por una pelota parada y nada más.

En el primer tiempo Vélez empezó un poquito mejor que su rival, manejando la pelota, con paciencia, pero otra vez (y como ya es recurrente en este equipo) lateralizando extremadamente el juego en ataque. Habrá que practicar un poco en la semana las diferentes variantes para lograr una verticalidad en el juego superior a la que se tiene hoy en día. Escudero probó de afuera, pero tapó muy bien el arquero del Cervecero, Damián Grosso. Sin embargo, con el correr del tiempo, Vélez se apagó. Quilmes fue cerrando los espacios, mediante esas dos líneas de 4 que siempre complican a los equipos que intentan jugar a ras del piso, y el conjunto del Bigotón, después de 3/4 de cancha, no tenía ideas. El conjunto del Sur tuvo una muy clara, de la mano de Musto. El volante del Cervecero metió la manito cuando fue a disputar la pelota con el Gato Sessa, y la mandó a la red, pero al ser tan evidente, el juez de línea que marcaba el ataque de Quilmes sancionó esa infracción al reglamento. Partido trabado, friccionado, y las situaciones de gol no abundaban, por eso en el minuto 42 sorprendió que Balvorín tuviera un cabezazo tan claro, y que no pudiera convertir. Un minuto más tarde, tuvo el gol luego de un centro desde la izquierda, pero el juez de línea, erroneamente, anuló el tanto.

El segundo tiempo fue un sufrimiento para todos aquellos que tuvimos que presenciarlo. El equipo no le encontró la vuelta al partido, y lo cierto es que Quilmes se conformaba con un punto tan importante como el que estaba sacando. Parecía que el resultado estaba sentenciado: un empate gris, aburrido, sin goles. Algunas individualidades era lo más cercano al gol que estaba el Fortín. Quilmes, ni noticias: a puro centro a la olla. Pero parece que hoy los dioses estaban del lado del conjunto de Liniers, ya que en una jugada preparada, Mauro metió el centro pasado, muy pasado, por detrás de la defensa cervecera, y Moreno y Fabianesi conectó de cabeza a la red. Vélez convertía y lograba un triunfo que tanto necesitaba para renovar las esperanzas en este equipo que pintaba bien, pero se desinfló. A partir de aquí, no mucho más: Vélez revoleó la pelota, como se debe hacer cuando se defiende un resultado a 10 minutos del final, y Quilmes no supo jugar al fútbol.

Habrá que ver como revertir la situación actual del equipo. Ojalá pudiera decirse que el equipo levantó y tuvo un volumen de juego acorde a los jugadores que tiene y al talento que poseen. La realidad es que si bien el resultado brinda aire fresco, no fue la solución definitiva para este difícil momento que atraviesa Vélez. Ricardo Lavolpe tendrá que pensar y repensar si realmente puede llegar a comprender el fútbol argentino. Por ahora, parecería ser que el único capaz de salvar al equipo es Moreno y Fabianesi, con sus goles en los últimos minutos. Últimamente se ha erigido como uno de los líderes del conjunto, y aporta tanto en ataque como en defensa. Una buena entre tantas pálidas.

jueves, marzo 08, 2007

Gastamos bien?


Desde el año pasado, Vélez ha cambiado la política que venía utilizando en cuanto a tratarse de refuerzos se refería. Como era sabido (y ya era un dato “famoso” en el ambiente del fútbol) el presidente Gámez, bajo la consigna de mantener las finanzas del Club en un nivel aceptable, evitando así un descalabro monetario, no incorporaba jugadores para ahorrar dinero (salvo casos excepcionales). Esta decisión, tomada durante varios años, no fue del todo aceptada por todos los fortineros una vez aplicada, pero con el correr del tiempo, y pensando en el bien común de la Institución, terminó siendo avalada. Al parecer, la economía del Club mejoró, ya que el año pasado Vélez Sarsfield incorporó 2 jugadores al plantel de fútbol profesional, debido a la partida de jugadores fundamentales a mitad de año (Somoza, Gracián, Roly): Iván Moreno y Fabianesi, y Emiliano Papa. El primero de estos dos ex Rosario Central llegó a Vélez a préstamo (si mal no recuerdo por una suma cercana a los U$S 600.000) por un año y con opción de compra. En cuanto al segundo, fue comprado de forma DEFINITIVA a Rosario Central en U$S 800.000 (y monedas) apostando así muy fuerte por este lateral-volante izquierdo santafesino. A principios de este año, Vélez volvió a incorporar jugadores: en este caso fueron el mexicano Méndez (a préstamo) y el jujeño Balvorín (comprado a Gimnasia de Jujuy).
Lo que nos compete aquí es el rendimiento de los jugadores dentro de la cancha.

1) Iván Moreno y Fabianesi: el doble 5 tan utilizado desde que llegó (primero por Miguel Angel Ru$$o, y actualmente por Ricardo Lavolpe) alternó buenas con malas. Al comenzar su incursión en nuestro querido Club, se lo vió un poco falto de fútbol y, sobre todo, de sacrificio. El español (nacido en Badajoz) muchas veces pecaba por intrascendencia, ya que no se hacía verdaderamente eje del medio, y Vélez perdía mucho fútbol. Año nuevo, vida nueva dicen, y así fue para Moreno. Con grandes actuaciones en los partidos del Repechaje de la Copa (en la vuelta convirtió un gol) y también en el torneo local, las dudas sobre sus capacidades se van despejando de a poco. Su pico en cuanto a rendimiento se trata fue ante Racing, convirtiendo el gol del empate en el último minuto, y manejando los hilos del equipo, a la vez que colaboraba en defensa. En un balance general, Moreno y Fabianesi tuvo una aceptable participación en Vélez en lo que va desde su llegada.


2) Emiliano Papa: caso singular el del oriundo de la provincia de Santa Fe. Desde su llegada, fue mirado con recelo (por esas cosas que tiene el fútbol). Llegado a Vélez una vez ya comenzado el campeonato, un día después de practicar con el plantel, Ru$$o lo puso como titular ante Racing (en la cancha de San Lorenzo) y la verdad es que ahí comenzó un campeonato muy malo para el correcaminos de la banda izquierda. En todo el torneo, se lo vió falto de profundidad, de fútbol, y sobre todo, de la denominada “garra”. Demasiadas veces levantó la patita al trabar, y esto no cayó nada bien. Al igual que a Moreno y Fabianesi, el nuevo año le trajo buenas nuevas a Emiliano, ya que fue la figura en los partidos pre-torneo local, con una excelente actuación ante Belgrano, una muy buena actuación ante Estudiantes, y dos grandes partidos ante Danubio (por la Copa). Los hinchas comenzaron a darle la derecha a un jugador que demostraba que sabía con la pelota, pero lamentablemente, a partir del último partido ante Danubio, Papa fue en picada. En los últimos partidos disputados por el lateral-volante, sufrió de lo peor que puede sufrir un jugador que ocupa la posición que él posee en un esquema de Lavolpe: la desaparición. Literalmente, Papa desapareció de la cancha, y no siguió siendo la salida más viable para el equipo, lo que colaboró para que éste careciera de poder ofensivo. En líneas generales, lo de Papa no ha sido bueno.


3) Mario Méndez: jugador pedido especialmente por Ricardo Lavolpe y muy conocido por él, causó cierta sorpresa al llegar a Liniers. Desconocido para todos los fortineros, demostró tener un buen manejo de pelota y una velocidad para nada despreciable. En cuanto a sus contras, carece de “dureza” al marcar a sus rivales, por lo que muchas veces pierde en las divididas, y debido al esquema de Lavolpe, deja desacomodada la banda derecha al volver luego de una incursión suya en ataque. Hasta aquí, el mejicano viene teniendo actuaciones bastante aceptables, y en el último partido ante Arsenal, ha sido el único que siempre ha intentado encarar y limpiar el juego, por así decirlo (por más que sus compañeros no le pasaron el balón). Otro aceptable para el oriundo de México.


4) Gustavo Balvorín: caso raro el del ex Gimnasia de Jujuy. Llegó como uno de los mejores jugadores del Apertura pasado, y fue titular en el equipo del Bigotón. El debut y el gol ante Belgrano ilusionaron a los hinchas velezanos, que veían en él el 9 que le estaba faltando al equipo. Sin embargo, Lavolpe decidió marginarlo al banco, y dejar sólo a Castromán y a Mauro como la dupla atacante. Todo esto tiene que ver con cuestiones tácticas de Lavolpe, quién decidió no jugársela por los 3 delanteros, y ser un poco menos ambicioso, para evitar descompensarse en el fondo (hoy en día, con el diario del lunes, vemos que nada garantiza nada). Demostró saber aguantar muy bien la pelota (algo que no teníamos desde las buenas épocas del Roly) y descargar hacia los costados, limpiando el panorama para los volantes que venían por los costados. Sin embargo, en los últimos 2 partidos se lo vió dubitativo y muy aislado de Mauro, sin tener tanto dominio de pelota (algunos lo acusaban de que la pelota “le rebotaba”). En un paneo general, podemos decir que lo de Gustavo es una incógnita aún.


En síntesis, el balance sobre las incorporaciones de jugadores del Club puede ser demasiado apresurado sin haber llegado aún a mitad de año, pero es bueno ir viendo y analizando las actuaciones de las mismas.

miércoles, marzo 07, 2007

El tercero en discordia?


Mucho se está hablando de el tipo de relación que actualmente mantienen el técnico de nuestro querido "Fortín", Ricardo "Bigotón" Lavolpe, y el plantel (en general). Por un lado, se comenta que habrían caído muy mal las declaraciones post-partido con Nacional de Montevideo, y los jugadores, a raíz de eso, estarían generando un supuesto "complot" para librarse del actual DT (versión que personalmente no comparto). Por otro lado, sale un referente del plantel como lo es Gastón "Gato" Sessa, a desmentir todas estas acusaciones (de forma obvia, es cierto) y a declarar que el plantel está comprometido con la ideología futbolística del ex arquero de la Selección Nacional.

Lo que intento apuntar en este post tiene más que ver con un protagonista principal en esta historia, y no con el conjunto del equipo de Vélez Sarsfield: Mauro Zárate. Se ha hablado y mucho de los supuestos "desplantes" que se estarían haciendo mutuamente entre el técnico y el jugador, debido al "poco sacrificio" y a la "poca colectividad" que demostraba Mauro en cancha para con el equipo y sus compañeros. Hasta se dice que habrían llegado a las manos (suena a amarillismo barato, se lo dejamos a Olé).

Qué es Mauro hoy en día? Es el salvador de Vélez? Es el único capaz de hacer algo diferente con la pelota en sus pies, y de darle las posibilidades más claras en ataque al equipo? Es el caprichoso del grupo, al cual si no le salen las cosas, refunfuña y se nubla? Es la estrellita del plantel, que está muy preocupado en su imagen y su nuevo peinado, en vez de estar con la cabeza puesta 100% en Vélez? O acaso es un jugador al cual, teniendo en cuenta todo el talento que posee y del que es consciente, no le interesa demasiado ayudar al equipo pasando la pelota (el famoso "defecto") sino hacer sus goles y poder formarse un futuro en los equipos grandes de Europa (el Barcelona tal vez?)?

Yo creo que Mauro es eso y mucho más. Desde su llegada revolucionó al Club. Todos los Zárate (el Ratón, el Roly, etc) venían hablando acerca de que el más chico de la dinastía "era el mejor". En cuanto debutó en Vélez, se pudo ver que tenía una gambeta endiablada, pero que la colectividad y el juego en equipo no era su fuerte. Por eso es que su progreso no se dió de un día para el otro, y necesitó varios campeonatos de suplente para entender como funciona nuestro fútbol (o por lo menos intentarlo). Una vez que estuvo consolidado físicamente y adaptado mentalmente a la élite del fútbol, con la titularidad como mayor estandarte, Mauro fue otro jugador, y los flashes y las notas de televisión no tardaron en llegar. Probablemente esto fue una parte que no ayudó a que Mauro cambiara esas pequeñas cosas en su juego que no lo hacían del todo "completo", pero eso no viene al caso.

La cuestión es que muchos hoy critican la forma de dirigirse de Lavolpe a sus dirigidos, pero uno se pone a pensar: y los jugadores qué? Por qué siempre son los damnificados en estas situaciones, cuando la hinchada muchas veces ve como no dejan todo en la cancha (es visible que en el Viaducto faltó sacrifico y ganas, provocado esto o no) y no puede hacer nada? No está mal que el técnico quiera tocarles el orgullo haciendo críticas públicas. Y tampoco está mal que a los jugadores les caiga mal. Mauro hoy día es el niño mimado de Liniers, y nadie puede ponérsele en contra porque en cuanto esto sucede, el comentario de "callate que si no fuera por Mauro estamos últimos" sale a flote. Criticar no siempre es para mal; sirve para mejorar y construir. Si uno le dice a Mauro "largala" no se opone a que haga una genialidad, se saque 2 tipos de encima y emboque el mejor gol de la fecha. Sí se opone a que en su cabeza comience a pensar como uno solo, y no como equipo, sintiendo que cada vez que pasa la pelota y sus compañeros la pierden, "el podría haber hecho algo mejor". Eso es lo que se nota en Zárate: la oposición a pasar la pelota por miedo a que el jugador que la reciba la pierda (situación que suele suceder). Por más que esto suceda, el jugador tiene que seguir jugando en equipo e intentar cada vez más, porque de pensar siempre como uno solo, el equipo no existe más.

domingo, marzo 04, 2007

Otra más...


En el ambiente y la jerga del fútbol, suele decirse que en la cancha "somos todos técnicos". Si este decir popular tuviera un reflejo en la realidad, a ningún técnico de los que fuimos al pequeño estadio del oloroso Viaducto se nos hubiera ocurrido hacer un cambio como el que se produjo a los 20 minutos del segundo tiempo. No hay razón lógica ni justificación terrenal como para explicar una sustitución de ese carácter. Si nosotros, los hinchas, no entendemos a nuestro propio director técnico cuando realiza estas cosas, como lo van a entender los jugadores?.

El Fortín hoy intentó superarse a sí mismo en la horrible actuación colectiva e individual, y perdió 3-1 ante los humildes jugadores de Arsenal. Fue un partido chato, caliente por momentos, y con las llegadas más claras provenientes de dos jugadores ex-Vélez: Óbolo y Valdemarín (este último anotó un gol y le pidió perdón a la gente de Vélez, que se dividió entre aplausos y puteadas). Ya es costumbre que los ex integrantes del plantel del Fortín nos "vacunen", por qué será? (gracias dirigentes, tenemos 9´s de sobra como para dejarlo ir al "Piojo" que siempre rindió, no?). Empezó con un Vélez activo, con un 5-3-1-1 (extraño esquema) con Broggi de titular, teniendo la pelota pero lateralizando (algo que sería una constante a lo largo de todo el partido) y un Arsenal bien paradito, de contra. En una jugada aislada, Garnier se manda por derecha, y mete un centro que resulta ser un tiro al arco (al parecer, y desde lejos, habría rozado en Bustamante) que se mete por detrás de Sessa. 1-0 para los del Viaducto y Vélez en desventaja. La gente, fastidiada por el pésimo nivel de la zaga de defensores (entre la línea de 3 y el achique, se está formando un combo mortífero...para nosotros) igualmente siguió alentando. Vélez iba sin una sola idea clara, de la mano de jugadas aisladas de un Escudero muy apagado, y de centros al primer palo de Méndez, para que Mauro la rozara de cabeza y Moreno y Fabianesi, de 9 en los últimos partidos, intentara convertir la jugada en gol. Sirvió un par de veces, pero no se pudo concretar. En una de las últimas del primer tiempo, luego de un centro muy bien ejecutado, el Ruso Ugglesich se elevó por encima de todos y clavó el frentazo abajo, a la izquierda de Cuenca, marcando así el empate. Con eso terminó el primer tiempo, que sería un órgasmo futbolístico, si se comparara con lo que sucedió en la segunda parte, donde ya a los 20 segundos Vélez perdía nuevamente, por una buena jugada de Óbolo por izquierda, metiendo un centro para un Valdemarín SOLO, entre Bustamante y Ugglesich. Floja respuesta de Sessa, ya que el cabezazo resultó "fofo" y sin potencia. Imagínense, señores, lo que fue Vélez a partir de este gol: un HERVIDERO. Para colmo de todos los males posibles, el señor Ricardo Lavolpe (amado por muchos en el comienzo de esta historia) comenzó con sus cambios inentedibles. Broggi por Balvorín (como tendría que haber sido desde un principio) y luego cometió casi un sacrilegio: Mauro por...Sergio Sena. Si, leyeron bien. Con un delantero, y Sena, Vélez iba a ir a buscar el empate. Así le fue. De la mano de centros sin destinatarios, y pases laterales, llegaron las contras del Arse. Luego de un tiro libre bien ejecutado, la línea del fondo velezana tiró el offside y, como siempre, alguien quedó enganchado, lo que permitió el 3-1 y partido liquidado.

Lo cierto es que el partido de hoy ante Arsenal fue una confirmación nomás de que siempre se puede estar...un poquito peor. La realidad nos indica a un Vélez participando de la Copa Libertadores (con buen puntaje al fin y al cabo) lo cual trae aparejado cansancio a futuro, y participando del torneo local (con mal puntaje) todo con los mismos jugadores. El efecto rebote que puede llegar a originarse a raíz del pésimo nivel de juego que vienen teniendo los jugadores puede afectar muy fuerte en lo anímico, y repercutir en las actuaciones por la Copa. Sin dudarlo, creo que ha llegado la hora de comenzar con la famosa "rotación"...esperemos que no incluya al técnico. La gente no es tonta, y se da cuenta de que todo lo que sabe Lavolpe, a veces parece esfumarse a la hora de tomar cartas en un equipo serio como Vélez. Habrá que ver como se revierte esto, y esperar que los jugadores no estén tomando revancha de los dichos del Bigotón.

viernes, marzo 02, 2007

Hacia donde vamos?


Algunos se preguntarán: la culpa es de los jugadores, que no están poniendo todo lo que tienen que poner, y se relajaron? La culpa es del técnico, que está mandando al muere a sus dirigidos y ventilando cosas que deberían quedar en la intimidad del plantel? La culpa es de la mala suerte?

La realidad es que, sea de quien sea, las culpas nunca sirven de mucho. Es valedero y útil realizar críticas en momentos en que las cosas no estén saliendo bien, para así mejorar las cosas, pero uno tiene que medir sus palabras. Es loable que el técnico haya querido tocarles "el orgullo" a ciertos jugadores (y a todos en general) con algunos de sus dichos a la prensa. Sin ir más lejos, Mauro fue uno de los primeros a los que apuntó a la hora de dar consejos para mejorar, recordándole que sería mucho más jugador si aprendiera a jugar en equipo (comentario que, según dicen los allegados al jugador, no habría sido bien recibido). Pero las declaraciones hechas luego del partido ante Nacional dejaron mucha tela para cortar:

* Es totalmente cierto que hay jugadores que todavía no hicieron su "crecimiento": todos los hinchas, creo, todavía estamos esperando que jugadores como Ocampo, Escudero, Robles, Broggi, Sena (en este último ya no quedan esperanzas) "exploten" de una buena vez su talento y sus capacidades. En lo que va de los últimos años, Vélez debe haber sido uno de los pocos clubes que no les da una, dos o tres oportunidades a los jugadores de las Inferiores que llegan a Primera, sino que les da... miles! Basta ver casos como el de Sena, que nunca recuperó aquel nivel que supo tener de la mano de Ischia, y que todavía perdura en el plantel (a veces hasta de titular, por esas cosas raras de la vida). Vale la pena seguir "esperando" a los jugadores? No deberíamos intentar con los más pibes? (a esta altura son todos pibes, pero algunos más que otros).

* Es totalmente cierto que Vélez, actualmente, es un conjunto de individualidades: el equipo se forma con pibes dispuestos a hacer SU gol, con SU jugada, SU gambeta y SU remate. Eso es claro. Se vió más que nada ante Nacional, con un Mauro que encaraba para SU gol. Un Robles que enganchaba para patear al arco y festejar SU tanto. Un Escudero que cada vez que la agarraba pateaba al arco (si hacemos 3 tiros por un peso, alguno voy a meter yo también). Los jugadores (o algunos de ellos) parecería ser que no entendieron el mensaje del DT, que pregona un fútbol por el piso pero armado colectivamente, en donde la pelota rote con sentido, hacia adelante, e intercambiándosela entre los diferentes integrantes del equipo.

* Es cierto que Vélez no sabe que hacer con la pelota a partir de la mitad de la cancha: habrá que ver como contrarrestar este tema, porque con una ligera presión del rival en nuestra salida, y una buena marca de Mauro, Vélez ya no tiene más ideas.


Pero lo que no dijo Lavolpe:

* Es también cierto que si el planteo táctico no funciona, la principal responsabilidad es del técnico: es totalmente loable que un técnico tenga sus convicciones y sus maneras de ver el fútbol, pero a la hora de entrar a la cancha, éste se tiene que atener a lo que tiene en su plantel. Si un esquema táctico no funciona como actualmente sucede en Vélez, donde hay dos mediocampistas centrales que, a la hora de abrir el juego, no tienen opciones, y deben pasar la pelota hacia atrás o tirarla larga para Mauro, vale la posibilidad de cambiarlo. No puede ser que con taparnos a Méndez, Papa y Mauro, y apretar un poquito adelante, ya no sepamos para dónde disparar. Tiene que existir algún "Plan B" para contrarrestar esto. En los últimos años, hemos visto a muchos equipos (la mayoría) venir a defenderse al Amalfitani, eso no es novedad: por qué no concentrarse en practicar un esquema para resolver este tipo de partidos?

* Es también cierto que se le siguen dando oportunidades a jugadores que no están a la altura de Vélez: el principal ejemplo es Sena. Cuando todos pensabamos que con la salida de Ru$$o este karma ya habría sido erradicado, el nuevo técnico volvió a probar con él. Uno o dos partidos, no hay problema, pero cuando se tiene que jugar por la Copa Libertadores, POR FAVOR, NO JUGUEMOS! No puede ser que Sena salga de titular en un partido de Copa, nos estamos jugando la clasificación. Como se puede justificar la inclusión de un tipo sin alma, sin juego, sin desborde, y con miedo?


No está "todo mal": recién empezamos. Esta situación se puede dar vuelta, pero acá todos vamos a tener que poner esfuerzo. Los hinchas, para bancar al equipo cuando juegue mal como ahora, y alentarlo sin parar. Los jugadores, para poner aún un poquito más de ganas a la hora de trabar una pelota. Y principalmente el técnico, para que no le pase lo mismo que le sucedió en La Bosta, donde por no querer abrir su cabeza y sus pensamientos, terminó siendo "comido" por el plantel. Ya se están escuchando rumores de cierto malestar de los jugadores con el técnico: eso no es bueno. Tenemos que estar todos unidos, sino, esto no va hacia ningún lado.