miércoles, diciembre 16, 2009

LA DÉCADA VELEZANA

Cuando surgió la idea de hacer un breve repaso histórico sobre lo que fue la última década para el Fortín, los primeros pensamientos nos llevaron específicamente a los dos títulos obtenidos, tal vez al campeonato ya lejano con Ischia que supo pelear un equipo sin figuras pero con hambre y, por qué no confesarlo, al torneo que se nos escapó en el 2004. “Si no pasaron tantas cosas”, dijo alguno por ahí.
Como buen velezano, la solución para ver si efectivamente se habían o no dado situaciones importantes para el club de nuestra vida era hacer un reconto de estos últimos 10 años y evaluar el resultado. Por eso, en un humilde trabajo, y en colaboración con algunos fortineros de ley (más el aporte de todos los que comentaron) les presentamos la década velezana.

Año 2000

Probablemente muchos de nosotros no recordemos demasiado esta etapa, tal vez por poco memoriosos, o tal vez por saber elegir qué cosas recordar y qué cosas no. Lo cierto es que el equipo de Falcioni, por ese entonces, supo tener algunos partidos que dieron para ilusionarse, pero pecó de poco ambicioso y dejó escapar la chance de lograr algo más. Recordados son los partidos en donde, a base de esfuerzo y perseverancia, el Fortín se ponía en ventaja, para luego terminar empatando o perdiendo por el estilo conservador del DT. Esto no quiere decir que haya sido una mala campaña, ya que Julio hizo debutar a muchísimos pibes de las Inferiores que luego permanecerían en el club a lo largo de gran parte de la década (algunos para bien, otros no tanto). A mitad del año 2000, Falcioni se iba a ir para dejarle su lugar a un personaje que resultaría ser muy malo para las aspiraciones deportivas del Fortín: Oscar Washington Tabárez. La llegada del uruguayo vino acompañada de muchas esperanzas, sobre todo después de ganar 3 partidos al hilo, sin embargo el equipo desbarrancó y no hizo una buena campaña. Su lugar lo tomaría Compagnucci.

Elchila05En el orden dirigencial, Vélez vivía una situación por demás traumática a nivel financiero. Los contratos de los históricos de la época dorada de los 90´ estaban dejando su huella, y hubo que hacer una limpieza importante. Era claro: Vélez se iba a la quiebra si no paraba con esto de aumentar sueldos a los consagrados para que permaneciesen en el club. Indirectamente relacionado a esto, Chilavert emigraba por primera vez de Liniers para recalar en el Racing de Estrasburgo, en un paso no del todo feliz. Recordar que venía de tener un fuerte encontronazo con Martín Palermo (en un partido en donde fueron echados ambos) y que Vélez había dejado hacía un tiempo de tener expectativas serias para pelear títulos. De una u otra forma, uno de los máximos ídolos fortineros partía.


Año 2001 - 2002

El paso de Carlos Compagnucci en el Fortín en su etapa como DT no fue demasiado alentador. Básicamente: duró 5 meses.

CompagnucciLlegó para reemplazar a Tabárez, ya comenzado el Torneo Clausura 2001, y si bien el equipo terminó 8º, nunca llegó a tener un caudal de juego importante. Vélez, por esos años, se basaba en muy pocos jugadores. A saber: su dupla central (Diego Crosa y Sebastián Méndez), una bestia en ataque como Jairo Castillo (de lo mejorcito que se vió en esos primeros 3 años de la década) y alguna estrella fugaz. No mucho más.

Para la segunda parte del año, el que desembarcó en Vélez fue Edgardo Bauza, último campeón de la Copa Libertadores con la Liga de Quito. Qué decir de su paso en el club, con un equipo que salió en el 5º lugar. Por esos días, el ánimo estaba caldeado en Vélez, y hasta Maurito Obolo nos embocaba con Belgrano. Bastante duró el Patón, teniendo en cuenta sus resultados, ya que afrontó la pretemporada del 2002 y casi todo el Torneo Clausura 2002, en el que Vélez finalizaría 9º. Ischia lo reemplazó a 3 fechas del final.

Para destacar de la época en que Vélez estuvo al mando de Bauza fue el episodio que se vivió en la Copa Libertadores, ante Nacional de Montevideo, en el José Amalfitani. Por esas épocas, Vélez andaba muy mal económicamente (como se destacará en la parte dirigencial) y los jugadores estaban cuanto menos fastidiosos con el tema de los pagos. El que encabezaba las protestas era Federico Domínguez, quien decidió que el equipo no concentrara en la previa del último partido por la fase de grupos ante el equipo uruguayo. Recordemos que Vélez solo necesitaba un empate. Cuenta la historia que desde tierras orientales alguien acercó una valija (no de Antonini) que algunos jugadores velezanos con más experiencia habrían recibido con mucha alegría, con el objeto de hacer menos fuerza que de costumbre. Ante esta situación, los más jóvenes de ese plantel intentaron revertir la situación, pero Federico Domínguez, junto a varios de los referentes, decidieron que era mejor plata en mano que el éxito deportivo. ¿El resultado? Vélez cayó derrotado y quedó afuera de la Libertadores.

El Vélez de Ischia terminó 5º en el Torneo Apertura 2002, una muy buena posición si tenemos en cuenta lo que habían sido torneos anteriores, y por momentos ilusionando a la gente. Con un grupo plagado de juveniles, el Fortín hizo una más que aceptable campaña y demostró a muchos que apostar a las Inferiores no era una locura (algo que clubes como Lanús luego copiarían en forma exitosa). El gran problema en ese torneo fue el incidente con Gastón Sessa, en aquel recordado 3-3 ante San Lorenzo, en el cual, ante un penal y expulsión que debió cobrarle Pezzotta a Paredes (bajó a Darío Husaín de atrás, que se iba al gol) vino el tanto del Cuervo y la locura del Gato. El ex Estudiantes LP tomó por el cuello al árbitro, luego de amenazarlo con golpearlo, y fue suspendido por 17 fechas.

Baldoseros de VelezA nivel jugadores, en la etapa 2000-2002 llegaron talentos como “Carucha” Muller, Martín Hidalgo, Julian Tellez, Nelson Tapia, Mayer Candelo y en el club, grandes valores en la defensa como Emiliano Dudar, Ladino, Eduardo Dominguez y Federico Dominguez. Lo único rescatable de toda la sarta de personajes que jugaron en el club tiene que ver con un caudillo en serio como Fabricio Fuentes. Este señor salvó en más de una ocasión a Vélez, que defendía con tipos como Dudar. Y esto es importante, porque muchos suelen quedarse con su etapa en el 2005, en donde salió campeón. Sin embargo, yo le estaré eternamente agradecido por la anterior etapa, en donde puso el pecho a momentos muy complicados.

El año 2001 fue el que marcó el rumbo respecto a lo que iba a ser para Vélez estos 10 años a nivel club. Por si algún fortinero estuvo desprevenido, le contamos: Vélez estuvo a un pasito nomás de la debacle. La crisis a nivel nacional, pero por sobre todas las cosas, el mal manejo del dinero del club a la hora de negociar contratos, provocaron que el Fortín tuviera un pasivo impresionante, y estuviera a punto de volverse Racing, para citar un ejemplo a los más chicos. La situación era desesperante, y cuando menos se vislumbraban soluciones, llegó la salvadora (para el club únicamente) pesificación, y las deudas pudieron, con el tiempo, ser paliadas. A partir de esta decisión económica que tomó el país, Vélez comenzaba un largo camino que su Presidente, Raúl Gámez, iba a denominar “Campeonato Económico”, en el cual las premisas fueron simples: no comprar jugadores, desarrollar las Inferiores y resignar resultados deportivos. Claramente muchos estuvieron en desacuerdo con esta medida pero a fin de cuentas iba a ser lo correcto.


Año 2003

Velez - RiverLa primera etapa del año, a nivel futbolístico, fue de lo mejor de Vélez hasta ese momento. En el Torneo Clausura 2003, Vélez finalizó 3º, detrás de River y Boca, y sólo a 4 puntos del campeón (River Plate). Ese equipo es recordado más que nada por un planteo táctico que Vélez no volvió a utilizar hasta el momento: 3-4-1-2. Con una columna vertebral posada en tipos como Fuentes, Cubero, Bustos y Gracián, con volantes externos con mucha llegada (Centurión y Sena) y con una dupla ofensiva que asustaba (Nanni y Bardaro) el Fortín era claramente un equipo ofensivo y se llevaba por delante a sus rivales. Es cierto: tenía algunas falencias en defensa, lógicas por el planteo. Sin embargo, se lograron cosas increíbles hasta ese momento como volver a ganarle a River de visitante después de tanto tiempo, o el triunfo ante Rosario Central (con el Chelito Delgado, Figueroa y el Cata Díaz) por 5-2 en el Amalfitani, y sin ir más lejos irse victorioso ante todos los grandes, excepto Racing (con el cual se empató). Gran equipo ese de Carlos Ischia, que tuvo un partido clave para lo que fue la caída de la pelea por el título, ante el duro Olimpo de Bahía Blanca de Julio Falcioni, como locales. Lo triste de ese torneo fue el quiebre de la relación entre la hinchada velezana y la pincha, luego de que los platenses nos derrotaran con el gol del debutante José Sosa por 1-0. Episodio lamentable que cortó una relación de muchos años y muchas alegrías conjuntas vividas.

Pero si esa primera etapa fue muy buena para el Fortín, lo que vino después nos devolvió a la realidad del club por esos años. 7 empates y 7 derrotas hicieron que Vélez finalizara en el 15º lugar. Sin embargo, el puesto de Ischia no corría peligro.


Año 2004

Vélez iba a jugar la Copa Libertadores, y tomando en cuenta esto, los dirigentes creyeron necesario reforzar con algunos jugadores al equipo. Sin embargo, se les escapó un detalle: nunca lo hicieron. ¿Llegaron jugadores? . ¿Reforzaron a ese equipo? Para nada. Los elegidos fueron: Maximiliano Flotta, el “Negro” De Souza y el más significativo para todos los fortineros: José Luis Félix Chilavert Gonzalez.Chilavert Regreso 2004

Después de tantos años, el gran Chila volvía para despedirse del club, jugando la Copa Libertadores. Mucho se lo presionó para que lo haga en el torneo local también, pero en una sabia decisión lo desechó. Es cierto, no somos poco memoriosos: el Chila no estaba en su mejor estado físico. Con bastante sobrepeso, su aparición en Vélez fue más un homenaje que algo serio, y nadie lo reprochó, lo reprocha o lo va a reprochar. Es parte importante de la historia del club, y al menos se dio el gusto. Ese equipo quedó eliminado penosamente de la Copa ante Unión Maracaibo por 4-2, de visitante, en un partido que debía empatar solamente para clasificar, y en donde Carlitos Ischia decidió salir a atacar. Cosas difíciles de olvidar aquellas. En el torneo local, Vélez iba a terminar 5º en ese Torneo Clausura 2004, una buena campaña en general, con un recordado empate ante Boca en la Bombonera (3-3, con gol del Pelado Bianchi sobre el final) y un contundente triunfo ante Chicago por 3-0 (golazo tremendo del Roly). Es bueno recordar que el máximo artillero del torneo fue Rolando Zárate con 13 goles.

En la segunda mitad del año iba a venir un torneo que será recordado con un sabor más que amargo, y un único culpable para muchos. Se había ido Ischia, llegaba Alberto Fanesi. Aquel Torneo Apertura 2004 iba a ser muy importante para el Vélez que luego saldría campeón, pero en su momento fue un trago difícil de digerir.Roly Zarate2 Varios partidos hacían pensar que era complicada la misión de salir campeón: el 6-0 ante Boca, el 0-1 ante Central (gol de emboquillada de Papa, no sé si algún memorioso recuerda, sobre el final y de contra) y la derrota ante Instituto como local. Sin embargo, pese a no hacer demasiados puntos, Vélez llegó a la última fecha con muchas chances de forzar un desempate: Newells debía perder y Vélez debía ganar. ¿Resultado? Newells, efectivamente, perdió ante el Rojo como visitante (con algunos incidentes entre ambas hinchadas que solían ser amigas; cualquier similitud con Vélez-Estudiantes es mera coincidencia) pero el Fortín no pudo derrotar a Arsenal, en parte, por un blooper de Gastón Sessa, a quien se le escapó la pelota de las manos (luego iba a irse corriendo al finalizar el primer tiempo, entre insultos y agresiones, para no retornar al campo de juego en la segunda parte, alegando lesión). Episodio triste para la historia velezana, no tanto por lo deportivo sino por los incidentes que se dieron a continuación, con destrozos en el estacionamiento cubierto y mucha violencia innecesaria. Se iba otro campeonato, como en el 2003, estando tan cerca…


Año 2005

Después de tanto sufrir, ese año iba a llegar la gran alegría fortinera: el campeonato. Vélez se consagró campeón del Torneo Clausura 2005, con grandes producciones futbolísticas, y le devolvía la alegría a su gente. Ese grupo tenía todo en contra: un entrenador que llegaba resistido (Miguel Angel Ru$$o, reemplazando a Fanesi), un grupo muy golpeado anímicamente luego de estar tan cerca del título y dejarlo escapar, y un arquero que se había convertido en el chivo expiatorio de ese fracaso. Cual historia de Hollywood, y luego de un mal arranque, el equipo de Russo, con trabajo, sacó adelante la historia y le dio un nuevo título al Fortín, el 6º a nivel local. Con partidos importantes como el 4-2 ante Gimnasia en La Plata, o el 3-1 ante Independiente, sin olvidarse del recordado triunfo como local ante Racing 2-1 sobre el final (¡gran jugada del Burrito Martínez!), la derrota ante Instituto (cuando nos preparábamos para festejar), y el glorioso partido ante el Pincha, derrotándolo por 3-0, con una lección de fútbol del equipo fortinero. Ese campeonato fue un premio al buen juego que desplegó Vélez, con un arquero como Sessa que tuvo, a mi entender, su mejor torneo en Vélez; un caudillo como Fuentes que retornó para ser campeón; un ENORME Leandro Somoza; dos por las bandas como Jonás y Marcelito Bravo, que tenían juego y despliegue; un encendido Gracián, motivadísimo; y una delantera en parte improvisada, con el Roly jugando un torneo bárbaro, y la sorpresa de Lucas Castromán como delantero. Gran torneo de ese Vélez que nos devolvió a los primeros planos del fútbol.

Campeón 2005

En la segunda parte del año, se iba a venir el gran desafío internacional para Vélez: la Copa Sudamericana. Era el único trofeo que el Fortín no tenía, y las ganas eran muchas. Había plantel, habían ganas. El sueño llegó hasta la semifinal, ante los Pumas de la UNAM, luego de un empate en 0-0 acá en el Amalfitani, el equipo mexicano nos hizo 4 allá, con una gran actuación de Bruno Marioni (3 goles) y nos dejó afuera. Gran decepción para un equipo que pintaba para lograr cosas importantes. Más allá de todo, se redondeó un buen año. En cuanto al torneo local, se terminó en la 3º posición, con un recordado 6-0 ante Gimnasia, en el Bosque, que significó el último partido de Marcelo Bravo como futbolista profesional, para pasar a incorporarse al cuerpo técnico, por su problema cardíaco. Se iba un gran jugador y una gran persona de la actividad.


Año 2006

Ya había pasado la frustración de la Copa Sudamericana, y ahora Vélez buscaba volver al plano internacional con la mayor competencia a nivel continental: la Copa Libertadores de América.Somoza Newells El equipo era casi el mismo y se empezó muy bien, con triunfos claros, como ante la Liga Deportiva Universitaria de Quito en la altura (1-3). Pese a la enorme cantidad de lesiones que habían afectado al plantel, Vélez llegó muy lejos, superando entre otros a Newell´s Old Boys de Rosario, primero de visitante, bancándosela adentro y afuera de la cancha (con un recordado triunfo por 4-2 en pleno Coloso, y una actuación descollante de Somoza, Mauro Zárate y Ereros) y luego de local. En cuartos se acabó el sueño ante las Chivas, luego de la polémica decisión de suspender la competición entre el partido de ida y el de vuelta, con motivo del Mundial. En ese interín, Vélez vendió a Leandro Gracián por U$S 3.500.000 al Monterrey de México, y le renovó por 3 años a Lucas Castromán. ¿Casualidad? No. Mucho se habló por esos días de la mala relación entre ellos, y un supuesto problema de polleras. Para colmo, el Villarreal se apalabró a Leandro Somoza para luego del partido ante Chivas, y Vélez, de a poco, veía como se desintegraba la columna vertebral del plantel campeón. Sería, finalmente, un 0-0 en Mexico y la derrota 2-1 en el Amalfitani. Una importante decepción para un grupo que estaba para más. En el torneo local, Vélez se ubicaría en la posición 10º.

En la otra etapa del año, se vieron quizá las cuestiones menos agradables para el Fortín, con discusiones en el seno del plantel y un equipo que no encontró nunca el rumbo. Pese a terminar en la 7º posición en el torneo local, el equipo (todavía) de Miguel Angel Russo sentía muchísimo la falta de un volante por derecha, con un lugar que fue ocupado por Bustos, Cubero y Ocampo, sin aportar soluciones. En el plano internacional, quedamos eliminados en primera ronda por Lanús, con un partido de ida accidentado, tras la corrida de Sessa a Castromán, luego de que el lujanense se hiciera estúpidamente expulsar. Ah, luego, ante Quilmes, se fusionarían en un abrazo interminable (?) al convertir Lucas. En el partido de vuelta, Sessa, protagonista nuevamente, hizo una de más, y al querer salir jugando le regaló un gol a Archubi que nos terminó de sacar de la Copa.

Miguel Angel Russo 2Lo más importante sin dudas de esta etapa fue la ida de Miguel Angel Russo, al finalizar este torneo, luego de su famosa frase: “Yo respeto los contratos”. Al día siguiente (y es literal) estaba dando la conferencia de prensa en Casa Amarilla. Lo que se dice un tipo con códigos. En su lugar, la dirigencia optó por un polémica nombre: Ricardo Lavolpe. Tras su reciente y estrepitoso fracaso al frente de Boca (perdió un campeonato prácticamente ganado) Vélez apostaba por el proyecto del DT y su forma de ver el fútbol. ¿Fue este enroque una forma de desafiar a Boca? Solo lo sabrá Gámez y los dirigentes de por ese entonces. Dato de color: antes de irse, recordemos que Russo había traído dos valores rosarinos a Vélez. Uno fue Marcos Charras, lateral izquierdo, ex Sub 20, que estaba en Rusia. ¿Su desempeño en el Fortín? Llegó, cobró, pero estuvo la mayor parte del tiempo lesionado. El otro caso fue el de Emiliano Papa, de igual posición en la cancha, que llegó por U$S 600.000 y la grave acusación de ser una operación encubierta para que Rosario Central pudiese saldar una deuda con Miguel Angel Russo. Por ese entonces Emiliano no era de los más queridos, y llegó hasta a ser calificado como uno de los peores jugadores en la historia del Fortín, por alguna encuesta no demasiado fiable

Mención especial para el espectacular torneo de Mauro Zárate, gran valor de las Inferiores, que llegó a la cifra de 12 goles y fue, junto a Rodrigo Palacio, el goleador del campeonato.


Año 2007

Un año cuanto menos traumático para la vida del Fortín a nivel deportivo. Se iniciaba un ciclo nuevo, con Ricardo Lavolpe como DT, y una nueva participación en la Copa Libertadores. Lavolpe cuernitosEl comienzo era bravo: Inter de Porto Alegre (último campeón), Nacional de Montevideo y Emelec de Ecuador. Obstáculos que parecían más complicados de lo que realmente fueron, ya que luego de esa primera victoria ante Inter como locales (3-0 y con la gente recordando a Russo de modo poco cariñoso; imponentes zapatos blancos de Lavolpe ese día) el Fortín logró una cómoda clasificación, en el primer puesto de la tabla global, y por esas cosas del destino, casi como si lo hubiese armado Spielberg, el rival fue… Boca Juniors, con Miguel Angel Ru$$o al mando (luego de hacerle 7 goles al Bolívar en un partido con muchas suspicacias, ya que los xeneixes, para clasificar, tenían que hacer 5). El resultado no fue feliz para Vélez, que cayó por 3-0 en la Boca, con aquel recordado episodio en donde Sessa le propinó una fuerte patada cual karateca a Rodrigo Palacio, y se hizo expulsar tontamente, con Vélez 0-1 en el marcador. Recordemos que esto no vino de la nada: ante el Inter, en Brasil, Sessa le había tirado una trompada a Maximiliano Pellegrino, y en el torneo local, ante Belgrano, no tuvo mejor idea que tirarle un pelotazo a un alcanzapelotas, desafiándolo a tener tanto dinero como él en el banco (?). sessaEn la vuelta, lo del Fortín pintaba para hazaña, porque Maurito, apenas comenzado el encuentro, la mandó a guardar, pero Riquelme, con gran colaboración de Bustos y Peratta, pateó un córner que se coló en el primer palo. Luego llegarían los goles de Mauro nuevamente y Ocampo que no alcanzarían. Gran partido de la era Lavolpe, muy recordado por la gran cantidad de chances de gol que tuvo el Fortín y por la superioridad que mostró ante un rival como Boca.

Escudero, Mauro, CastromanEn el plano local, Vélez finalizó en la 9º posición, con una dura derrota por 3-1 ante Boca como locales, en un partido plagado de irregularidades a favor del equipo xeneixe, que significó el primer enfrentamiento entre Russo y Lavolpe ante sus ex clubes. ¿Lo más rescatable de ese torneo? Como siempre, el triunfo ante Chicago, que ya era costumbre, luego de ir perdiendo por 1-0 al minuto de juego. Ah, para recordar algunos nombres que no eran muy queridos por ese entonces: Zapata, Bustamante, Silva, Balvorin, Bustos, Ugglesich, Mario Méndez. Es importante destacar que finalizado este torneo se decidió vender al último gran valor del club, Mauro Zárate, al Al-Sadd SC de Qatar, quedándole al club U$S 17.000.000.

En la segunda parte del año, el equipo finalizó 10º en la tabla. El grupo ya estaba desgastado, y pese a tener un muy buen arranque, tuvo una abultada derrota ante River Plate por 5-0 en el Monumental, con Cabral jugando como único delantero (?) y 4-0 ante Boca. No quedó mucho más del estilo Lavolpe, que hizo jugar a Razzotti de líbero y a Floris de winz izquierdo (era central, le recuerdo señor lector).


Año 2008

Año extraño para el Fortín, sobre todo porque empezó sin demasiadas expectativas, algo que luego se revirtió en base a resultados (no tanto buen juego) y una dupla en la delantera que parecía entenderse muy bien (Balvorín – Silva). Se había ido Lavolpe, y había venido Hugo Tocalli, un tipo con mucha experiencia con juveniles y con las premisas de perfil bajo y trabajo intenso para triunfar.

El espejismo duró poco. Después de un comienzo avasallante, con 3 victorias seguidas (incluida una en Bahía Blanca, reducto siempre complicado para el Fortín) el equipo se desdibujó, y todo lo bueno que había hecho se fue diluyendo. Se perdieron partidos importantes para pelear, y se triunfó en varios de los denominados “ganables”. El recuerdo menos preciso dirá que no fue una buena campaña, pero los números dicen lo contrario: se terminó en la 5º posición, aunque a 11 puntos del campeón (River).

Emanuel Alvarez 2

Lamentablemente también hay que recordar, ya fuera de lo deportivo, la pérdida de un velezano como Emanuel Alvarez, porque algún estúpido decidió que así fuera. Una locura más en este fútbol argentino que, aún, no aprendió.

En la segunda parte del año, a Vélez vendrían jugadores como Nicolás Cabrera y los ya hijos pródigos Leandro Somoza y Fabián Cubero, y se iría un emblema como Hernán Pellerano. Fue una campaña magra, con hechos lamentables, como la lesión del León Somoza, quien estuvo fuera de las canchas hasta este Torneo Apertura 2009, pero con otros mucho más felices, como las sendas victorias ante Boca y River, como visitantes, después de muchísimo tiempo (fueron 3-2 y 2-1 respectivamente). El protagonista estelar en la actuación de Vélez a lo largo del torneo fue, sin dudas, la irregularidad. Ganó tantos partidos como empató (7) y eso se notó. Para colmo, hubo un bajón muy importante como local, con partidos perdidos en forma demasiado clara (0-3 con Colón, 0-2 con Lanús, 0-2 con Gimnasia LP). Finalizando en la 9º posición, y con un público velezano que nunca fue de la ideología futbolística del DT Hugo Tocalli (más defensiva que ofensivo, y sin demasiada mano dura a la hora de controlar a un plantel joven) el ex DT de las juveniles nacionales dejó su lugar al que luego sería campeón, Ricardo Gareca.

Año 2009

Finalmente, el año que transcurre en la actualidad. Pasaron muchas cosas en este periodo que tuvieron más que ver con las alegrías que con las tristezas del comienzo de la década. Sin dudas, el podio se lo lleva el tan ansiado título del Torneo Clausura 2009, con actuaciones épicas que quedaran en la retina de cualquier velezano de ley. Lo más importante fue la creación del grupo que logró esta conquista. Por un lado, a finales del 2008 había asumido una nueva Comisión Directiva, encabezada por el ya conocido Fernando Raffaini. Junto a él, su gran apuesta: Cristian Bassedas como manager del club. Un tipo del riñón del club, con títulos e historia velezana encima. La primer gran decisión a cargo del manager fue elegir al nuevo DT, y acá es cuando empieza a cobrar importancia el rol de Bassedas en lo que vendría después: se la jugó y dijo “Gareca tiene que ser el técnico”.Gareca - Bassedas

La primer reacción de varios fue la desconfianza, pero él se mantuvo firme en su postura y finalmente el Tigre llegó a Liniers (para ser campeón). Los refuerzos fueron claramente de jerarquía: Sebastián Domínguez (campeón con Newells), Maxi Moralez (campeón sub 20) y, a último momento y con el torneo comenzado, Joaquín Larrivey (a préstamo). También teníamos algunos encubiertos, como Nicolás Otamendi o Franco Razzotti que con el tiempo iríamos descubriendo, y tipos como Zapata o López, que revirtieron pésimas actuaciones del 2008.

El torneo empezó complicado, con algunos empates que no daban lugar a demasiada ilusión, pero luego se revirtió la mano con 3 triunfos seguidos (incluido Estudiantes en la Plata, rompiendo un invicto de más de 2 años), algunos empates más, algunas victorias más (incluido el histórico partido ante Colón, dando vuelta un resultado 0-2 en Santa Fe), aparecieron las primeras dudas ante Racing Club, y luego la pérdida del invicto ante Gimnasia LP (con mucha mala suerte), para luego ganar 3 partidos seguidos, lograr un impresionante empate ante Lanús (con un jugador menos toda la segunda parte) para culminar con el recordado partido ante el Huracán de Cappa y todo el aparato periodístico encolumnado detrás de él. Finalmente, se había alcanzado la gloria: Vélez campeón nuevamente del fútbol argentino.

Vélez campeónMucho se ha hablado ya del torneo conseguido, y sería redundante mencionar la tarea espectacular que llevaron a cabo los jugadores y el cuerpo técnico, mostrando garra cuando había que mostrarla y buen juego cuando había que aportarlo. Figuras como la dupla de backs centrales, un enganche talentoso, un centrodelantero goleador improvisado o dos resistidos que pasaron a ser claves para la levantada del equipo, ya han sido reconocidos como lo merecían. Lo único que se puede sí repetir es el agradecimiento eterno para este grupo de jugadores que dejaron todo en cada partido y se levantaron frente a cada adversidad que se les presentó, como lo siguen haciendo hoy por hoy. Cuerpo Técnico y Jugadores: GRACIAS.


Con respecto a la segunda parte del campeonato, la verdad es que nos deja un sabor amargo de saber que, con un poquito más de suerte, las cosas podrían haber cambiado. Faltaron un par de centímetros para poder soñar en grande con la única Copa que le faltan a las vitrinas del club, y bastó solo una semana para echar por tierra la mayor parte de los sueños respecto al torneo local. Sin embargo, los jugadores siguieron luchando hasta el final y nos ilusionaron con un sprint final a todo trapo, como alguna vez Bianchi supo inculcarle a los gladiadores de la dorada década de los 90. No pudo ser, así de simple. Tres partidos malos nos dejaron afuera de todo. Nuevamente, solo restó decirle GRACIAS al Tigre y a sus dirigidos, que emocionan al verlos jugar.

FORMACION IDEAL DE LA DÉCADA: Gastón Sessa; Fabián Cubero, Fabricio Fuentes (Sebastián Domínguez), Nicolás Otamendi, Emiliano Papa; Jonás Gutiérrez, Leandro Somoza (Franco Razzotti), Marcelo Bravo (Victor Zapata); Leandro Gracián (Maximiliano Moralez); Rolando Zárate (Rodrigo Lopez), Lucas Castromán (Mauro Zárate).

JUGADOR DE LA DÉCADA: Fabián Cubero. Sin dudas el "Poroto" ha sido el jugador más identificado con el club en la década, a lo que se le suma que los dos torneos que el club consiguió en la misma lo tuvieron como protagonista. Dueño de una personalidad fuerte, y mal catalogado como el resto de los clubes como un tipo solamente duro en la marca, Fabián demostró una evolución notable a la hora de tener la pelota y jugarla con criterio. Su versatilidad y su capacidad para poner a compañeros en situaciones de gol (esto último se vió más que nada en el torneo pasado) lo catapultan como el mayor exponente del sentimiento fortinero dentro del campo de juego.


MEJORES 5 PARTIDOS DE LA DÉCADA

1) Vélez 1 – Huracán 0 (Torneo Clausura 2009)

2) Colón 2 – Vélez 4 (Torneo Clausura 2003)

3) River 0 – Vélez 1 (Torneo Clausura 2003)

4) Vélez 5 – Rosario Central 2 (Torneo Clausura 2003)

5) Nueva Chicago 1 – Vélez 2 (Torneo Apertura 2002)

PEORES 5 PARTIDOS DE LA DÉCADA

1) Vélez 0 – Olimpo 1 (Torneo Clausura 2003)

2) Boca 6 – Vélez 0 (Torneo Clausura 2004)

3) Vélez 1 – Arsenal 1 (Torneo Clausura 2004)

4) River 5 – Vélez 0 (Torneo Apertura 2007)

5) Vélez 2 – Instituto Cba. 3 (Torneo Clausura 2005)


Y así se fue una década más de nuestro glorioso Fortín… ¿Una década más dije? Para nada. La década que culmina con la llegada del tan ansiado CENTENARIO. ¡Cuántos recuerdos nos van a pasar por la cabeza! El torneo del 68´ para los más memoriosos y experimentados; la decepción en el 71´; los planteles con estrellas que nunca funcionaron; la llegada del Virrey; los torneos locales; la Copa Libertadores con ese zurdazo inolvidable del Tito Pompei y las atajadas del arquero más grande de la historia; la hazaña en Japón, ante el poderosísimo Milan; los campeonatos del 98´, 05´ y 09´. En fin, todas esas cosas (malas y buenas) que nos hacen ser cada día un poco más fortineros. Porque Vélez es algo superior, Vélez es más grande que todos, Vélez es nuestra vida. Por todo esto y mucho más, ¡GRACIAS FORTÍN!


Colaboraciones: Mario, Yamila, Matías, Federico, ¡gracias por la paciencia y por los aportes!

5 comentarios:

8 mentiroso dijo...

Sepan disculpar el problemita de ubicación de las fotos, nos excede.
Saludos y espero les guste!

Victor Tidona dijo...

Cuantos recuerdos, nombres para el bronce y algunos para el olvido.

Muchas gracias!

Anónimo dijo...

No me pongas a Sessa como el mejor arquero de la década, por favor..

tuvo más malas que buenas.. Habiendo atajado en el 2000, todavía Chila. El mejor fue CHILA.

Ignacio dijo...

Que bien armado esta muchachos! La verdad que de muchas cosas no me acordaba, y otras hasta me emocionaron recordarlas: el último partido de marcelito bravo contra gimnasia! Me acuerdo que lo vi desde bariloche, me habia ido de viaje de egresados y no lo podia creer.

En sintesis, una buena decada coronandonos 2 veces, y para mi, si hacemos las cosas bien, la que viene va a ser mucho mas exitosa: Hay equipo, hay dirigencia y hay hinchada.

Vamos velez.

walter_rel dijo...

Te deseo un ¡Feliz Navidad!

Saludos desde mallorketas