Vélez - Chicago: el duelo

Como bien mencionábamos en el post anterior, todavía no está bien delimitada la cuestión de si Chicago constituye o no un clásico para la gente de Vélez. En su gran mayoría, me animo a decir que no, que el Torito de ninguna manera está a la altura de un Club como Vélez Sarsfield, con toda la historia y los logros que tiene. Por otro lado, es notoria la trascendencia que se le da a este partido desde varios lados (periodismo, la gente, los jugadores, etc).

Vélez tiene la obligación de salir a ganar el partido ante Chicago, ya que un empate no le sirve para absolutamente más que nada que para que Lanús se aleje un poco más en la lucha por entrar a la Copa Sudamericana. Chicago, por su parte, apretado hasta el cuello por el descenso, se juega su permanencia en Primera y también la posible concreción de la hazaña de ganarle al Fortín (una sola victoria, en el 82´, con quema de quincho incluida). Hay mucho en juego y de eso no hay dudas.

Al parecer, el Bigotón no haría demasiados cambios con respecto al equipo que derrotó a Godoy Cruz en Mendoza, más que algunas obligados por lesión:

El equipo: Peratta; Méndez, Ugglesich, Pellerano, Broggi; Ocampo, Coronel, Bustos, Escudero; Mauro y Balvorín. A simple vista, sólo se vislumbran las modificaciones de la salida de Bustamante y el posterior ingreso por Ariel Broggi, y la salida de Lucas Castromán (por enésima vez, está lesionado y dijo que "no quiere arriesgar más") para que entre el señor Gustavo Balvorín. De a poco uno ve que el equipo se va formando, que aparecen nombres nuevos (Ocampo se afirma, Coronel aparece, Escudero es una realidad) y lo ilusiona sinceramente para el campeonato que viene, donde con la llegada de los 3 refuerzos que tanto nombra Lavolpe, se podría generar algo realmente bueno (más sin la presión de jugar la Copa Sudamericana y descuidar el campeonato local, en caso de no jugarla). Uno ve que finalmente en Vélez se está empezando a jugar bien, con un mediocampo de buen pie (exceptuando al limitado Maxi Bustos) y un número 5 que juega y mucho al fútbol. A su vez, los casi wings por derecha e izquierda aseguran una ofensividad plena a la hora de atacar, y una defensa sólida como la que conforman los 4 fantásticos (?) (en este caso afectada por la lesión de Bustamante) sin Pellegrino comienza a funcionar. Habrá que esperar hasta el viernes a las 3 de la tarde, en ese horario tan ridículo, para ver como se dará el partido y si realmente Chicago saldrá a buscar los 3 puntos, o vendrá al Amalfitani a defenderse como lo ha hecho siempre.